A la venta en España desde el mes pasado, el nuevo Fiat Tipo supone la vuelta de la marca italiana al segmento de los sedanes desde que dejó de comercializarse el modelo Linea. Mucho más sofisticado y atractivo, y con una vocación de vehículo global, válido para varios mercados (se venderá en un total de 40 países), el Tipo está disponible con una carrocería de cuatro puertas que dará paso pronto a una de cinco y a finales de año a otra de formato familiar . El sedán que nos ocupa tiene una longitud de 4,54 metros y su gama está compuesta de momento por un motor de gasolina 1,3 l. de 95 CV y dos diésel, un 1,3 l de 95 CV y un 1,6 l. de 120 CV. Las cajas de cambios son de cinco marchas para el diésel de 95 CV y de seis para el gasolina y el otro diésel de 120 CV.

Para celebrar el lanzamiento, Fiat propone una edición limitada a 400 unidades con la denominación ´Opening Edition´ para los vehículos dotados del propulsor de gasolina de 95 CV y ´Opening Edition Plus´ para los que monten el diésel más potente de 120 CV. Estas versiones tienen un precio de partida de 10.990 euros y equipan un nivel de dotación especial muy completo.

El resto de la gama, cuyo coste con descuentos comienza en los 9.900 euros, cuenta con dos niveles de acabado ´Easy´ y ´Lounge´, que pueden incluir elementos como las llantas de 16 ó 17 pulgadas, seis airbags, interior configurable en varios ambientes, sensores de aparcamiento, lluvia y luces, programador de velocidad o faros antiniebla con función de alumbrado en curva. También está disponible el moderno sistema multimedia de la marca ´UconnectTM´ de pantalla táctil de 5 pulgadas, manos libres Bluetooth, reconocimiento de voz y conectividad auxiliar.

Con uno de los mejores maleteros de la categoría (520 litros), el Tipo presenta un habitáculo desahogado que se remata con materiales resistentes y agradables al tacto. El conductor tiene todo a la mano y la visibilidad es buena hacia todos loas ángulos debido a la superficie acristalada y al tamaño de los retrovisores.

En marcha, es cómodo incluso al pisar zonas en mal estado, y eso que las suspensiones tiran a lo firme. El motor diésel de 120 CV empuja muy bien desde abajo y gasta muy poco: 4,2 l./100 km. Por otro lado los de 95 CV en gasolina y diésel (1,3 l. ambos y 5,7 y 4,1 l. 100/km, respectivamente), son suficientes para los límites actuales y para el planteamiento del coche.