La gama del fabricante inglés está en pleno proceso de renovación. Si hace pocas semanas dimos cuenta en estas mismas páginas de la nueva generación del modelo de base, ahora le toca el turno al curioso Clubman, que abandona la configuración asimétrica de sus entradas para ganar en practicidad. El anterior tenía una sola puerta detrás más pequeña en el lado del acompañante para el acceso a las plazas traseras, que se abría en sentido opuesto. Ahora, el nuevo Clubman adopta un concepto menos rompedor, pero más civilizado y funcional por sus dos puertas traseras de apertura normal, y mantiene el portón de doble hoja del maletero, que se abre en compás hacia los lados. Este movimiento puede ser eléctrico deslizando un pie por debajo de la trasera.

Igual que en casi todas las nuevas generaciones, la longitud aumenta unos 22 cm. respecto al MINI de cinco puertas, hasta llegar a un total de 4,25 metros. La anchura es de 1,80 metros y la altura es de 1,44 metros. La distancia entre ejes también es mayor en relación con el MINI de base, lo que repercute en una habitáculo más aprovechable y un maletero de 360 litros que se pueden ampliar hasta los 1.250 litros con los asientos traseros abatidos.

En lo que respecta a las mecánicas, el MINI Clubman monta un motor diésel de 150 CV (Cooper D) y tres de gasolina, uno de 102 CV (One), otro de 136 CV (Cooper) y el más potente de 192 CV (Cooper S). Los One y Cooper son bloques de tres cilindros y el resto son de cuatro. Las cajas de cambios son de seis relaciones de serie, con la opción de cambios automáticos de seis marchas para los motores de tres cilindros y de ocho velocidades para los de cuatro. Como es habitual en la gama y, para no ser menos que sus hermanos, el Clubman también tendrá en un futuro una versión John Cooper Works.

La carta de dotación está ajustada a las últimas tecnologías de la marca, por eso podemos encontrar en él elementos como el sistema ´MINI Driving Modes´, con el que podemos ajustar la respuesta del coche entre varios perfiles, llantas de hasta 19 pulgadas, suspensión de dureza variable o el nuevo y completo sistema de infoentretenimiento de la marca.

Los precios van desde los 23.800 euros del One, hasta los 29.900 euros del Cooper S, pasando por los 26.200 euros del Cooper y los 28.400 euros del diésel Cooper D.