Audi nos ha convocado de nuevo para participar en una experiencia de conducción sin parangón, la Audi Driving Experience, que viene a ser la escuela de conducción que Audi ofrece a sus clientes y que, en esta ocasión, nos deparó un programa apasionante en el escenario del Circuito de Cataluña, en Barcelona, en una jornada en la que tuvimos como anfitrión a Jordi Gené, el famoso piloto que, junto a su hermano Marc, dirige esta entidad de formación de la marca alemana. Con más de 20 años de experiencia en la materia, la división española de esta Audi Driving

Experience nos ofreció el privilegio de hacer el curso Sportscar, que es el más avanzado que ofrece la marca, con sus vehículos RS (RS4, con 450 CV y RS6, con 560 CV) y R8 (V8 de 430 CV, ó V10 de 525 CV). Además tuvimos la suerte de contar con un monitor de lujo: Marc Gené, hermando del director de la Audi Driving Experience española, único español ganador de las 24 Horas de Le Mans, piloto oficial de Audi en la legendaria prueba de resistencia, y piloto de pruebas de la Scudería Ferrari de Fórmula 1.

Fue precisamente Marc Gené el encargado de ofrecer el broche final del curso, dándonos una vuelta al trazado de Montmeló y dejándonos ver cómo se puede poner al Audi R8 más allá del límite, haciéndolo ir de costado metros y más metros y con una velocidad de paso por curva que nos pareció increíble y espeluznanate.

El curso en la Audi Driving Experience comienza con una breve noción teórica para optimizar la postura al volante, conocer el subviraje y el sobreviraje y cómo se corrigen, y tener noción de la trazada ideal en una curva. Se pasa después a hacer pruebas de frenada y esquiva. Se procede a continuación a ir aprendiendo el circuito por sectores. Y por último se rueda tras los monitores a trazado completo (el del Gran Premio) para ver hasta dónde se puede llegar.

Es una experiencia muy recomendable para cualquier amante de la conducción; más aún si uno simpatiza con la marca Audi; y no digamos si uno es el afortunado poseedor de un Audi R8. Una inolvidable sucesión de sensaciones que también tuvo su vertiente práctica. Por primera vez se nos ofrecía la oportunidad de comparar en un mismo vehículo -un Audi RS6- la eficacia de los frenos carbo-cerámicos opcionales frente a los convencionales. Parece mentira cómo con ellos instalados se puede detener el coche en tan escaso número de metros y tantas veces seguidas sin que el sistema de la más mínima muestra de fatiga.

Tanto los Audi RS4, como los RS6 o el potenciado R8 Plus (549 CV) nos han ofrecido todo tipo de satisfacciones.