La canciller alemana, Angela Merkel, ha celebrado este viernes el compromiso alcanzado con los socialdemócratas para entablar negociaciones formales para crear un Gobierno de coalición tras unas conversaciones que ha definido como "intensas, serias y profundas".

"Se trata de un documento de dar y recibir, como debe ser", ha sostenido la mandataria alemana tras 24 horas de negociaciones para sacar adelante un documento preliminar sobre el que negociar posteriormente y lograr finalmente un Gobierno tras las elecciones del 24 de septiembre.

"El resultado no es superficial", ha afirmado sobre un acuerdo que recoge el compromiso de trabajar "en serio para lograr los requisitos hoy y en esta legislatura para poder vivir también bien en Alemania en diez y 15 años". Se trata de la seguridad social y de las inversiones de futuro en el país y en especial de las familias y niños, ha explicado.

Respecto a Europa, Merkel ha expresado el compromiso de conservadores y socialdemócratas para conseguir un resurgir de Europa. "Por ello tampoco tengo miedo de encontrar ahí también soluciones comunes con Francia", ha indicado con la mirada puesta en las propuestas del presidente francés, Emmanuel Macron.

Schulz espera convencer al SPD

Por su parte, el líder del Partido Socialdemócrata (SPD), Martin Schulz, ha alabado el que considera un "resultado excelente". El expresidente del Parlamento europeo ha anunciado que recomendará a los miembros del SPD en el congreso extraordinario del próximo 21 de enero, en Bonn, votar a favor de dar comienzo las negociaciones formales con los conservadores. "Ahora debemos convencer a los miembros del partido", ha reconocido.

"Mi partido, al inicio de esta semana, dejó claro que no había líneas rojas, pero sí que queríamos que hubiera un contenido rojo", ha comentado sobre el documento donde se fijaron las guías sobre cómo poder gobernar el país los próximos cuatro años.

"Teníamos claro que no serían unos contactos fáciles", ha afirmado sobre unas reuniones que comenzaron el pasado domingo. "Pero contamos con una atmósfera constructiva y conversaciones justas", ha afirmado sobre unas negociaciones que fueron "largas y duras".

Merkel también ha dicho que era consciente de las dificultades a las que se enfrentaban. "Estaba segura de que era una tarea difícil", ha declarado y ha reconocido que al principio no estaba segura de que fueran a lograrlo. "Discutimos sobre cómo lograr el camino y al final lo logramos. La dirección era la misma", ha aseverado.

Merkel admite que la negociación no será fácil

"Las negociaciones no van a ser más fáciles que los primeros contactos", ha adelantado. "Pero soy optimista de que las cosas se van a lograr", ha asegurado la canciller sobre las futuras negociaciones formales para crear "un Gobierno estable".

Nunca antes en Alemania se había tardado tanto en formar Gobierno. Tras el fracaso de las negociaciones de Angela Merkel con los ecologistas y liberales, finalmente la reedición de la gran coalición con el SPD ha sido la opción elegida para evitar nuevas elecciones, aunque el resultado aún no está garantizado.

Los más optimistas cuentan con que pueda haber nuevo Gobierno a finales de marzo o comienzos de abril, pero antes de ello hay unas fechas clave en el camino. La primera de ellas el congreso extraordinario del SPD el 21 de enero, en el que el partido decidirá si finalmente apoya la decisión de Schulz de iniciar negociaciones oficiales con los conservadores. En el bloque dirigido por Merkel, la decisión será tomada por la Ejecutiva del partido.

Al día siguiente, si el SPD da luz verde a las negociaciones, estas podrían arrancar. A continuación, hacia mediados de febrero, se espera que el SPD someta al voto de sus militantes el acuerdo de coalición pactado con los conservadores, un proceso que podría demorarse hasta tres semanas y costar hasta 2 millones de euros.

Líneas maestras de la negociación

El documento con las líneas maestras consensuado entre los tres partidos alemanes, al que han tenido acceso DPA y Reuters y que consta de 28 páginas, establece que Alemania trabajará en coordinación estrecha con Francia para fortalecer la eurozona.

En concreto, la CDU, la CSU y el SPD se comprometen a dedicar "fondos presupuestarios específicos" a la estabilización del bloque comunitario y a apoyar la "convergencia social" y las reformas estructurales, todo ello con el objetivo de conformar la base de un futuro "presupuesto de inversión" para la eurozona.

"En estrecha alianza con Francia, queremos fortalecer de forma sostenida y reformar la eurozona para que el euro pueda afrontar la crisis global", sostienen los tres partidos llamados a formar la gran coalición.

El acuerdo alcanzado por los conservadores con los socialdemócratas también contempla limitar la reunificación familiar de refugiados a un tope de 1.000 personas al mes. A cambio de esta cifra, Alemania reducirá en el mismo número la cantidad de refugiados que acoge de Grecia e Italia en virtud de un pacto con la Unión Europea.

La reunificación familiar se aplicará solo para los casos de inmigrantes casados antes de huir de sus países y solo si no han cometido delitos, no son peligrosos y si no tienen perspectivas de regreso a su país en un futuro próximo.

El documento de consenso entre los tres partidos fija su compromiso para formar un "gobierno estable y efectivo". El nuevo Ejecutivo intentará "fortalecer la cohesión social" en Alemania y superar "las divisiones que han surgido" tras el fracaso de las anteriores conversaciones para formar gobierno con los ecologistas y los liberales.