La participación en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Francia alcanzó el 65,30 % a las 17.00 hora local (15.00 GMT), un descenso considerable de cuatro puntos porcentuales con respecto al 69,42 % de franceses que habían votado a la misma hora en la primera ronda en abril pasado.

Según los datos facilitados por el Ministerio del Interior, la participación es también sensiblemente inferior a la de la segunda vuelta de 2012, cuando ya había votado el 71,96% de los ciudadanos con derecho a voto, en unas elecciones que acabaron en casi el 80 %.

Con respecto a las presidenciales de hace diez años, el porcentaje de electores cae todavía con más fuerza, ya que a las cinco de la tarde el 73,87 % de los franceses habían sufragado entonces.

El número de votantes hoy tampoco supera por ahora a la anterior vez (2002) en que un candidato de la extrema derecha -en aquella ocasión Jean-Marie Le Pen, padre de la hoy candidata Marine Le Pen- llegó a la segunda vuelta, cuando era del 67,60 % en este momento.

Según las previsiones del instituto demoscópico Ifop, la participación final en esta segunda ronda se cerrará en torno al 75%.

Los colegios electorales se cerrarán en los pueblos y las ciudades pequeñas a las 19.00 (17.00 GMT), y en las mayores localidades del país lo harán una hora más tarde.

Los departamentos que a esta hora registran una menor afluencia de votantes son los de Córcega del Sur, con 53,6%, y Córcega del Norte, con 56,4%, que votaron en favor de Le Pen hace dos semanas, y el de Seine Saint Denis, con 54,6 %, que apoyó mayoritariamente al izquierdista Jean-Luc Mélenchon en primera vuelta.

Precisamente, el líder del movimiento La Francia Insumisa ha sido muy criticado al no haber desvelado todavía el sentido de su voto, algo que el socioliberal Emmanuel Macron ha considerado que podía beneficiar a la ultraderechista Le Pen.

A lo largo de la jornada, la participación será uno de los vectores más vigilados, pues puede ser un buen indicativo del apoyo que el centrista Macron y su rival, la ultraderechista Marine Le Pen, tengan en las urnas.

Ambos aspirantes despiertan recelos en amplios sectores de la sociedad francesa, sobre todo después de que el llamado "frente republicano" -la alianza entre izquierda y conservadores- para cerrar el paso a la extrema derecha haya recibido su certificado de defunción por el propio Macron.

Si se registra un porcentaje final de participación cercano al de la primera vuelta (78 %) celebrada el pasado 23 de abril, las posibilidades del exministro de Economía de conseguir una amplia victoria aumentarán exponencialmente, a juicio de los analistas.

El candidato socioliberal Emmanuel Macron fue recibido hoy entre aclamaciones y vítores al ir a votar en la segunda vuelta. Con gesto contenido pero sonriente, Macron acudió a depositar su sufragio en la localidad de Le Touquet, en el noroeste del país, rodeado por un gran número de vecinos y de enviados de los medios de comunicación.

Acompañado por su esposa, Brigitte, Macron, con traje y corbata oscuros, abandonó el domicilio familiar en esa turística localidad sobre las 10.45 horas (08.45 GMT) para dirigirse al Ayuntamiento, donde depositó su voto un cuarto de hora más tarde.

Macron acude a votar ante una gran expectación

Macron acude a votar ante una gran expectación

Macron, aclamado por cientos de personas en Le Touquet. Agencia ATLAS | EFE

Centenares de personas rodearon a la pareja cuando abandonaron su casa en busca de un apretón de manos o de un "selfi".

Macron pasó el resto de la mañana en familia en su residencia de Le Touquet, antes de viajar a París, a donde llegó pasadas las 14.00 (12.00 GMT) para seguir la jornada electoral.

Precisamente, el lugar elegido por el socioliberal para festejar su victoria si ésta llega finalmente, la Explanada del Louvre, tuvo que ser evacuada por la Policía durante varias horas a causa de una operación de "verificación".

A las 14.30 (12.30 GMT), las fuerzas se seguridad anunciaron el fin de los controles y el "retorno a la normalidad", tras adoptar esta "medida de precaución".

Evacúan por seguridad la zona del Louvre

Evacúan por seguridad la zona del Louvre

Alerta en el Louvre por unos "bolsos sospechosos". Agencia ATLAS | REUTERS

Fuentes de la campaña de Macron habían señalado a Efe que el desalojo se produjo cuando los perros de la policía adiestrados para buscar explosivos detectaron "bolsos sospechosos" dentro de la inspección rutinaria que estaban realizando.

Marine Le Pen vota en su feudo electoral

Le Pen, por su parte, votó en su feudo electoral de Hénin-Beaumont, en el norte de Francia, una media hora después de Macron, entre fuertes medidas de seguridad.

Con apariencia seria y ante un buen número de periodistas, la aspirante de la extrema derecha, a quien las encuestas dan como derrotada, acudió a sufragar acompañada por el alcalde de la ciudad, Steeve Briois.

Vestida con un traje oscuro y una blusa fucsia, Le Pen apenas se entretuvo a saludar a los electores del colegio en el que emitió su sufragio.

Poco después de hacerlo, rodeada de guardaespaldas, se dirigió a su coche y abandonó el lugar.

Le Pen almorzó en familia en Hénin-Beaumont antes de tomar la ruta hacia París, donde seguirá el escrutinio de la segunda vuelta.

Activistas de Femen protestan contra Le Pen Agencia ATLAS | REUTERS

La votación de la líder del Frente Nacional se vio perturbada, al igual que en la primera vuelta del 23 de abril, por una protesta de las activistas feministas de Femen, que desplegaron una gran pancarta en la iglesia de la ciudad, cerca de su colegio electoral.

En el cartel que exhibieron las cinco militantes, subidas a unos andamios, podía leerse: "Marine al poder, Marianne a la desesperación", en referencia a la simbólica figura de la República francesa y a sus valores de libertad, igualdad y fraternidad.