Dos imágenes, una de la vista general durante la investidura de Donald Trump como presidente de EEUU de este viernes y otra de la de Barack Obama en 2009, han puesto de manifiesto que a la ceremonia de Washington asistió este año un número significativamente menor de espectadores, aunque no hay aún datos oficiales.

Según la CNN, en 2009 1,8 millones de personas presenciaron in situ al juramento del presidente demócrata. Para ver cómo juraba su cargo Trump no hay aún datos y los medios del país se fijan en el número de viajes en metro. Este año, la ciudad ha sumado 193.000 viajes, mientras que en 2009 fueron 317.000.

Es verdad que este viernes fue una jornada fría y lluviosa, que no invitaba a pasar un tiempo prolongado a la intemperie.

En todo caso, la organización de la ceremonia asegura que ha utilizado unas 250.000 entradas, una cifra similar a las de otras investiduras.