Dora Lilia Gálvez, la mujer colombiana que fue violada, quemada y empalada en Buga, Colombia, el pasado 6 de noviembre ha muerto tras 25 días luchando por su vida. La noticia, que ha sido confirmada por su hermana en Caracol TV, ha conmocionado a la sociedad del país sudamericano.

Dora había salido de la UCI tras mostrar una mejoría y lograr respirar por sí misma. Sin embargo, este pasado miércoles sufrió una hemorragia que la provocó un paro cardíaco. ''El riesgo inminente de muerte, por los múltiples traumas, siempre fue alto, siempre tuvo un problema cerebral severo y nunca despertó'', ha afirmado Jenny Gámez, secretaria de Salud de Buga.

Por su parte, los agentes de la investigación han confirmado que el agresor de Dora ya ha sido identificado pero que todavía no ha sido detenido. Se trata de su expareja, quien se mostraba obsesionado con ella.

Las autoridades colombianas continúan ofreciendo una recompensa de más de 8.000 euros para quien les ayude a capturar al agresor.