Decenas de personas resultaron heridas este miércoles, varias de ellas de gravedad, cuando un tren regional entre Nimes y Montpellier (sur de Francia) chocó contra un árbol que había caído a las vías a causa de una fuerte tormenta, informaron las autoridades.

Un portavoz de los servicios de salvamento CODIS dijo, en declaraciones a la cadena BFM TV, que hay al menos una treintena de heridos, "de ellos una decena graves".

Uno de las afectados fue evacuado en helicóptero en estado de urgencia absoluta, según el portavoz del CODIS, quien indicó que se ha establecido un puesto médico avanzado.

Una portavoz de la Sociedad Nacional francesa de Ferrocarriles (SNCF) explicó a Efe que el siniestro se produjo entre las 15.30 y las 15.45 hora local (13.30-13.45 GMT) en las proximidades de Lunel, cuando el tren, en el que había unas 200 personas, circulaba a 140 kilómetros por hora -su velocidad habitual en ese tramo- e impactó contra el árbol caído.

Los hechos ocurrieron durante "una tormenta de una violencia excepcional" con fuertes vientos y granizo, subrayó la portavoz de la SNCF.

Pese a la violencia del choque, el convoy, que circulaba en el sentido Montpellier-Nimes, no descarriló.

A raíz del siniestro, el tráfico ferroviario quedó interrumpido entre las dos ciudades en ambos sentidos.