El aeropuerto bruselense de Zaventem, atacado el pasado 22 de marzo en un atentado reivindicado por el Estado Islámico (EI), no disponía de un plan de crisis en caso de ataque terrorista, según un informe de la comisión de investigación al que tuvieron acceso hoy varios medios belgas.

Según la comisión de investigación, los planes de emergencia con los que contaba el aeropuerto internacional "habían sido diseñados principalmente para hacer frente a un único tipo de desastre, un accidente aéreo", pero no abordaban la posibilidad de un ataque terrorista.

"No había un plan dedicado específicamente para atentados terroristas", lamenta la comisión de investigación en el informe, del que se hizo eco la agencia Belga.

El informe denuncia que en el momento en el que se perpetró el ataque en el aeropuerto "solo había un perro especializado en la búsqueda de bombas y explosivos".

También hace hincapié en la falta de coordinación de la policía en el aeropuerto, algo que ya expresaron 100 de los 400 agentes en Zaventem en una carta abierta en la que denunciaron fallos de seguridad que pudieron facilitar los atentados.

Entre otras cosas, los policías apuntaron en su denuncia a que gran parte de los trabajadores del aeropuerto que se ocupan de la gestión de los equipajes en las pistas tienen antecedentes judiciales, "a menudo por hechos criminales graves".

La comisión de investigación de los atentados del 22-M es también muy crítica con la "deficiente" gestión de la situación y el "fracaso total" de entre los servicios de emergencia en las primeras horas después del ataque.

El informe también recomienda un examen "a fondo" del funcionamiento del centro de crisis y lamenta que la red de telefonía móvil estuviera "completamente saturada" durante las horas posteriores al atentado.

Esto provocó que los bomberos y los médicos de urgencias debieran hacer uso de aplicaciones como Whatsapp para coordinar sus actividades, puntualizó el informe.

Algunas de las recomendaciones que hace el estudio son la revisión de los planes de evacuación y de la gestión del tráfico, ya que el aeropuerto de Zaventem tiene solo una vía de acceso principal a sus instalaciones.

Por otro lado, la comisión sí es positiva con el plan de contingencia elaborado por la empresa pública de transportes, STIB, tras el ataque en la estación de metro de Maelbeek, el cual "funcionó bien", recogió Belga.

El doble atentado contra la estación de metro bruselense de Maelbeek y el principal aeropuerto de la capital belga causó 32 muertos y más de 300 heridos.