Más de cien radicales de extrema derecha, que fueron dispersados por la policía, han interrumpido una concentración pacífica de cientos de belgas que acudieron a la Bolsa de Bruselas para mostrar su rechazo al terrorismo tras el doble atentado en la capital el pasado martes, lo que ha provocado un enfrentamiento verbal entre los dos grupos.

Los agentes antidisturbios tuvieron que intervenir para ayudar a vaciar la plaza de la Bolsa gradualmente tras la llegada del numeroso grupo de ultras, que gritaban "Belgian hooligans", a los que rodearon y desplazaron y, luego, utilizaron cañones de agua para disolverlos.

"Estamos en nuestra casa", decían, al tiempo que aseguraban que ya han sido "demasiado tolerantes" con los extranjeros, cuando fueron increpados por ciudadanos molestos por haber interrumpido el homenaje a las 31 víctimas de los atentados.

La tensión en la Bolsa era palpable, según ha constatado Efe en el lugar, dado que llegaron caminando con cánticos, bengalas y a paso rápido al lugar de la concentración, donde se habían reunido cientos de personas para mostrar su solidaridad con las víctimas, pese a haber sido aplazada por los organizadores a petición de las autoridades belgas por motivos de seguridad.

Los hooligans se colocaron inicialmente en un lado de la gran alfombra de flores, velas, mensajes, juguetes que depositan los belgas y turistas desde el pasado martes en la Bolsa, gritando a los manifestantes que se encontraban con banderas y pancartas encima de la escalinata desde donde fueron abucheados.

Poco después, decidieron "asaltar" la escalinata y desplazar a los ciudadanos que les encararon desde el otro lado y desplazar a todos ellos, hasta que, rodeados por los antidisturbios, fueron obligados a abandonar la plaza.

No faltaron los saludos nazi y las cervezas en mano de los ultra. Uno de los radicales respondió a un ciudadano flamenco que le dijo que no podía creer que buscaran un enfrentamiento en la Bolsa que "ya hemos sido bastante tolerantes" con los extranjeros, según ha podido constatar Efe.

El flamenco consideró en declaraciones a Efe que los hooligans "siempre buscan dónde crear follón", pero que lo hicieran en la Bolsa tras los atentados de Bruselas "es muy triste e inapropiado".

Nueve detenidos

Por otra parte, al menos menos nueve personas han sido detenidas en el marco de más de una docena de operaciones policiales en diferentes puntos de Bélgica efectuadas este domingo, según ha informado la Fiscalía en un comunicado.

En total se han efectuado 13 operaciones: cuatro en Malinas, una en Duffel, tres en Bruselas, una en Molenbeek, una en Anderlecht y tres en Laeken.

Como resultado han sido detenidas nueve personas de las cuales cinco han sido puestas en libertad, de acuerdo con la nota oficial.

Planeaban atacar una iglesia

También se ha sabido que la red yihadista vinculada con los atentados de París y Bruselas planeaba perpetrar un atentado contra una iglesia, indicó el diario francés Le Journal du Dimanche (JDD), que cita al abogado belga de uno de los detenidos.

El letrado, según sus fuentes, aseguró que un miembro de ese comando le comentó que el grupo proyectaba un "gran golpe" y un ataque contra un templo cristiano.

El diario se pregunta si los atentados del martes en el aeropuerto internacional de Zaventem de Bruselas y en una estación de metro no son más que una "versión aligerada" de los planes de la célula de Salah Abdeslam, el presunto cerebro logístico de los ataques de París, tras su arresto el 18 de marzo en Bruselas.

Las autoridades belgas, recuerda el periódico, encontraron 15 kilos de explosivos TATP en los registros efectuados el pasado martes en el apartamento de los asesinos de Bruselas, en el distrito bruselense de Schaerbeek.

El "JDD" añade que en el piso inspeccionado el jueves en la localidad de Argenteuil, a las afueras de París, se halló también explosivo de tipo TATP en una cantidad suficiente como para fabricar varios cinturones explosivos.

Ese apartamento pertenecía a un francés de 34 años identificado como Reda Kriket, condenado en Bruselas el año pasado en rebeldía a cinco año de prisión después de que se emitiese una orden de arresto internacional contra él en 2014 por su implicación en una red de captación yihadista.

Kriket, según la cadena "i-Télé", era cercano al supuesto coordinador de los ataques del pasado 13 de noviembre en Francia, Abdelhamid Abaaoud, abatido en el asalto de la Policía francesa el 18 de noviembre a un apartamento de Saint-Denis, a las afueras de la capital gala.