La delegación de la oposición siria en las negociaciones de paz dijo que no retornará a Ginebra para seguir participando en este proceso a menos que vea progresos concretos en el ámbito humanitario en Siria.

"La delegación abandonará mañana Ginebra y no volverá hasta que veamos progresos en el terreno", declaró el dirigente de la oposición Salim Muslet en una comparecencia ante la prensa.

El mediador de la ONU para las conversaciones de paz suspendió temporalmente las conversaciones de paz y anunció que éstas se reanudarán el próximo día 25.

"Le hemos dicho a De Mistura que no habrá conversaciones significativas sin alivio (humanitario) para nuestro pueblo", agregó.

Por su parte, el líder opositor Riyadh Hijab, aseguró que la Comisión Suprema de las Negociaciones (CNS), la alianza de la oposición política y militar reconocida para estas negociaciones, "no está boicoteando el proceso" y que su único objetivo es que se cumplan las garantías internacionales que recibieron antes de acudir a Ginebra de que habría mejoras para los civiles en Siria.

"Estamos hablando de cuestiones humanitarias que no pueden ser negociadas en la mesa porque el régimen intenta chantajear a la ONU de esta manera y no aceptaremos este tipo de maniobras", declaró Hijab.

"De Mistura -agregó- ha repetido que las cuestiones humanitarias están por encima de las negociaciones".

El dirigente opositor recordó que las necesidades humanitarias de los sirios son parte de una resolución del Consejo de seguridad de la ONU a la que debe darse cumplimiento y que es un tema que no puede equipararse a un alto el fuego.

"Sólo puede haber un cese de las hostilidades cuando haya una transición política, cuando Bachar Al Asad no esté en Siria. No puede hacerse ni cumplirse en presencia de Al Asad ni de milicias extranjeras", declaró Hijab.