La Unión Europea reaccionó hoy con satisfacción ante el resultado del referéndum de Escocia en contra de su independencia del Reino Unido.

El resultado es "bueno" y favorece una "Europa más unida y fuerte", declaró el presidente de la Comisión Europea (CE), José Manuel Durao Barroso.

Si Escocia desarrolla ahora una mayor autonomía cultural y económica bajo el paraguas del Reino Unido podría convertirse en "un modelo" para el resto de países con movimientos independentistas, opinó el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz.

Schulz se mostró "contento" con la victoria del "no" y también con el desarrollo de la consulta, "un proceso interno y democrático en el Reino Unido, donde el referéndum había sido reconocido por el Gobierno en Londres".

La atención se centra ahora sobre los cambios que seguramente ocurrirán después del referéndum, opinó el primer ministro irlandés, Enda Kenny, quien se refirió a los relacionados con la devolución de poderes. "Este proceso lo seguiremos muy de cerca en Irlanda", dijo.

El presidente del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, destacó que los escoceses han mostrado su "preferencia por la estabilidad dentro del Reino Unido y de la UE".

Con todo, señaló Weber que pese al resultado "el número de ciudadanos que expresaron su aspiración de independencia no puede ser ignorado".

El resultado del referéndum ha sido para el primer ministro checo, Bohuslav Sobotka, una muestra de que "el mundo aún no ha enloquecido totalmente", opinó el socialdemócrata, cuyo país se separó de la vecina Eslovaquia en 1993 mediante un acuerdo político entre ambas partes.

La líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen, señaló que la posición europeísta de los independentistas escoceses le parece "bastante incoherente", en la medida en que querían sustituir "el yugo" del Reino Unido por "la sumisión" a la Unión Europea.

"Proponer liberarse de una unión presentada como un yugo para sustituirla por otra sumisión, otra dependencia, en este caso a la Unión Europea me parece bastante contradictorio", comentó Le Pen en una entrevista a la emisora "RFI".

La Comisión Electoral (CE) de Tailandia, país bajo un Gobierno militar, ensalzó la imparcialidad y la tolerancia en el referéndum. En un comunicado, el comisario Somchai Srisutthiyakorn, que se encuentra en Escocia junto con otros miembros del organismo, destacó que la votación transcurrió de forma "pacífica" a pesar de la polarización de las opiniones, según el diario "Khaosod".

El comisario europeo de Comercio, el belga Karel De Gucht, se felicitó hoy por el resultado del referéndum en Escocia y dijo que el sí escocés hubiera sido "un terremoto político de la naturaleza del imperio soviético".

De Gucht se mostró "aliviado" y señaló que la elección de Escocia por la independencia "hubiera sido el final de la UE como la conocemos", en unas declaraciones a Radio 1 y según recoge el diario "De Staandard".

"Pero no habrá efecto bola de nieve", se felicitó, en referencia a otras regiones con debates secesionistas como Flandes o Cataluña. Pese al resultado, el comisario se mostró convencido sin embargo de que esas regiones seguirán su propia lucha, aunque puso en entredicho su suerte.