El opositor Tomislav Nikolic se proclamó vencedor en las elecciones presidenciales serbias, y auguró que "Serbia no se desviará de la vía europeísta", al tiempo que expresó su deseo de "proteger al pueblo serbio en Kosovo".

"Las elecciones transcurrieron de forma magnífica y digna", declaró Nikolic en la sede de su Partido Progresista de Serbia (SNS) al proclamar la victoria frente a su rival, el reformista proeuropeo Boris Tadic.

Por su parte, Tadic, favorito en los sondeos previos y presidente del país desde 2004 hasta el pasado abril, cuando dimitió para adelantar estos comicios, reconoció su derrota.

"La victoria ha sido justa y merecida. Le deseo suerte (a Nikolic) en el desempeño de ese difícil cargo", declaró Tadic.

Nikolic aseguró que "estas elecciones no fueron un referéndum sobre quién llevará a Serbia a la Unión Europea (UE) y quién no lo quiere", sino que los ciudadanos votaron por un cambio para que se solucionen los problemas acumulados durante los dos mandatos de Tadic y su Partido Democrático (DS).

El jefe del Estado electo declaró que las prioridades de Serbia son desarrollar su economía, reducir la pobreza y aumentar la natalidad, así como luchar contra la corrupción y el crimen.

Nikolic dijo que se retirará de la jefatura de su partido político "para ser el presidente de todos los ciudadanos".