El Gobierno de Venezuela informó de la recuperación del control de la cárcel El Rodeo I y de "fuerte resistencia" de los internos en la penitenciaría El Rodeo II, ambas cercanas a Caracas, donde realiza un operativo con miles de agentes que dejan un balance momentáneo de al menos 17 heridos.

"Se rinden internos amotinados en El Rodeo 1. Quedan focos de fuerte resistencia en Rodeo 2", escribió el ministro venezolano de Comunicación, Andrés Izarra, en su cuenta de Twitter @Izarradeverdad.

Asimismo, Izarra aseguró que más de ocho horas después del inicio de la requisa, en la que participan unos 5.000 efectivos militares, hay 16 guardias heridos "entre oficiales, suboficiales y tropa", que se suman así a un recluso lesionado, el único confirmado por el Gobierno entre los reos.

El viceministro del Interior de Venezuela, Néstor Reverol, indicó a periodistas que "afortunadamente no son heridos graves", salvo uno que fue evacuado del lugar con un "tiro rasante en el cráneo".

"Vamos a seguir con la requisa extraordinaria que estamos haciendo", indicó el viceministro, al explicar que en este momento están organizando la operación para iniciar la operación de toma de El Rodeo II.

"Necesitamos restablecer el orden interno", agregó.

El operativo se produce después de que el pasado domingo 22 personas murieron y 14 resultaron heridas en El Rodeo I, en un enfrentamiento supuestamente de bandas rivales que se disputaban el control del penal.

El ministro venezolano de Interior, Tareck El Aissami, declaró a la estatal Venezolana de Televisión (VTV) que muchos internos habían bajado a los patios del retén y estaban colaborando con las fuerzas de seguridad.

"Hay respeto y resguardo a todos los que están privados de libertad, no hemos tenido incidentes, tenemos más de 5.000 efectivos para garantizar que se desarrolle sin violar los derechos humanos", apuntó El Aissami.

Familiares de los presos han estado apostados en las afueras de la prisión desde que se inició el operativo, donde fueron dispersados con gases lacrimógenos y agua a presión, mientras los parientes respondían lanzando piedras y otros objetos, según imágenes transmitidas por medios locales.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió ayer al Gobierno de Venezuela que tome medidas "concretas" para garantizar la seguridad en las cárceles del país.

La CIDH expresó su "profunda preocupación" por los "altos índices" de violencia en los centros penitenciarios "controlados por organizaciones criminales y no por el Estado", indicó en un comunicado.