A las tres y media del mediodía, cuando la ciudad seguía su ritmo habitual, en el monte comenzaba una bonita romería protagonizada por la Virgen de la Fuensanta. Fiel a su cita, y con motivo de la celebración de su festividad (el domingo siguiente al día 8 de septiembre), la patrona de Murcia emprendía el camino hacia la ciudad, donde permanecerá durante toda la Feria de Septiembre.

Acompañada de los romeros, la Morenica hacía su aparición en el barrio del Carmen pasadas las siete y media de la tarde, anunciando su inminente llegada los cohetes y aplausos de los presentes. No faltaron los «¡Guapa!», las miradas fijas al rostro de la Fuensanta, ni las cientos de fotos a través de los teléfonos móviles. Todos querían acercarse a su patrona y conseguir, al menos, uno de esos miles de pétalos de rosas con los que, una vez más, fue recibida desde el balcón de la sede de la archicofradía de la Sangre. Ayer Murcia olía a fiesta y así lo hicieron ver todas las personas que, desde la iglesia del Carmen y hasta la Catedral, aguardaban el paso de la Morenica.

De grana y oro y portando la Cruz de Caravaca, la Virgen de la Fuensanta, una vez recibida por las autoridades civiles, políticas, militares y religiosas, emprendió el camino hacia la plaza Belluga rodeada de cientos de murcianos. Comenzaban las fiestas de la ciudad y muchos fueron los que quisieron participar en este recibimiento. La próxima cita con la Morenica tendrá lugar el 13 de septiembre, día de su festividad, cuando tenga lugar una procesión caustral con la imagen de la Fuensanta en la Catedral. Al día siguiente, a las diez de la noche, se celebrará la tradicional ronda de despedida a la Fuensanta, para el martes, 15 de septiembre acompañarla de nuevo en la multitudinaria romería.

Tarde de estreno

En el plano institucional fueron muchas novedades las que se pudieron ver a las puertas de la iglesia del Carmen. La tarde fue de estrenos, pues se pudo ver al alcalde de Murcia, José Ballesta, al presidente de la Región, Pedro Antonio Sánchez, y al delegado del Gobierno, Antonio Sánchez-Solís, quienes participaban por primera vez en este acto ostentando sus nuevos cargos.

Una vez más, Ballesta quiso saltarse el protocolo y, en vez de esperar a la Fuensanta, quiso salir a su encuentro en el momento que los cohetes anunciaban su llegada. Tampoco cumplieron con la tradición las concejalas, quienes decidieron acudir a la recepción oficial vistiendo ropa colorida y veraniega, abandonando el color negro. «Es un día de fiesta», comentó la edil María Dolores Sánchez. Tanto José Ballesta como Pedro Antonio Sánchez dijeron que a la Fuensanta le han pedido «trabajo para los murcianos».