«Desde principio de temporada me estoy encontrando muy bien físicamente y creo que estoy demostrando que valgo para este equipo». Así de claro y contundente se mostró ayer el jugador del FC Cartagena Miguel Ángel Riau, quien estuvo a punto de salir del equipo albinegro el pasado mes de julio, pero que se ha convertido en pieza clave para el conjunto de Pato.

El valenciano, que habló ayer en rueda de prensa, quitó hierro a la derrota de la pasada jornada en Cádiz, la primera que sufre el equipo cartagenero en la presente temporada. «Sabíamos que la derrota podía llegar en cualquier momento y que cuando sucediese no nos tenía que afectar. Y ahora no hay que cambiar nada por perder tres puntos y menos al haber sido en el campo de un equipo fuerte, como el Cádiz, al que además le salió un buen encuentro», aseguró.

Asimismo añadió que «a cualquier equipo le gustaría estar en nuestra posición -el Cartagena es líder del grupo IV de Segunda B-pese a haber perdido un partido y que llevemos tres encuentros sin ganar no es más que una anécdota. Debemos seguir sumando puntos y acallar las dudas que se hayan podido crear».

Sobre el rival del próximo domingo, el Arroyo extremeño (estadio Cartagonova, 17.00 horas), Riau avisó de que «vendrá a defenderse echando gente atrás. Nosotros estamos entrenando para contrarrestar a un equipo que se cerrará. No sé si será un rival parecido a los que ya han pasado por el estadio, pero nosotros tendremos que jugar entre líneas y abriendo el campo, sin que nos pillen a la contra».

El jugador, que se considera polivalente, se muestra contento por jugar, aunque cambia de posición continuamente, lo ha hecho por la banda derecha y por la izquierda. «No me siento incómodo para nada. He jugado en distintas posiciones y lo que un futbolista quiere es disputar muchos minutos», dijo, a la vez que se muestra dispuesto a sustituir al lesionado Navarro en el lateral izquierdo, si el alicantino no puede jugar finalmente, aunque cree que podrá jugar. «Navarro está evolucionando muy bien y creo que podrá jugar el domingo, pero si hiciera falta estaría disponible y preparado para jugar», aseveró.

La historia del valenciano con el club blanquinegro es, cuanto menos, rocambolesca, aunque ha terminado haciéndose un hueco en la plantilla. Fue fichado el 30 de junio de 2010, con Juan Ignacio en el banquillo, por el entonces director deportivo, David Buitrago, como uno de los jugadores de más futuro del momento tras haber debutado con el Valencia de Primera División. Aunque, tras una lesión, no dispuso de muchos minutos en el equipo albinegro y fue cedido hasta final de temporada al Valencia Mestalla, completando un rápido viaje de ida y vuelta a orillas del Turia. Tras otra campaña sin hueco en el equipo, este año ha conseguido por fin abrirse paso en el Cartagena y confía en seguir siendo pieza clave para conseguir el ansiado ascenso a Segunda.