El FC Cartagena sufrió más de lo esperado para doblegar a un Loja CD que, si bien apenas se prodigó en el ataque, sí que supo maniatar a un equipo local al que le faltó intensidad y llegada.
Los jugadores entrenados por Pato estuvieron demasiados espesos. Muchas imprecisiones en los pases, escasísimas llegadas a las inmediaciones de la meta contraria y algunos sustos en defensa, provocaron que el partido entrara en una fase de incertidumbre final que resolvía el francés Florian al aprovechar un balón suelto dentro del área para mandarlo a la red y dar a su equipo tres puntos más -ya son quince-, y continuar así en solitario en el liderato del grupo cuarto de Segunda División B.
Con este triunfo el FC Cartagena se afianza arriba -a cuatro puntos del segundo-, y además bate el récord de mejor arranque de una temporada en los últimos catorce años. Nadie había conseguido ganar los cinco primeros encuentros, y eso lo ha logrado este conjunto, dirigido por Pato. Nueve goles a favor y tan solo dos en contra dan síntoma de que aspira a todo, aunque sea a veces luchando contra sí mismo para sumar los puntos.
Se presumía un partido plácido para los pupilos de Pato, pero no resultó ni mucho menos como se esperaba. Y es que el equipo granadino empezó el choque con la intención de no dejar sacar el balón controlado a los locales. Ni Marcos Rodríguez -ayer novedad en la alineación-, ni Diego Segura o los carrileros conseguían tocar desde atrás el esférico.
Eso provocaba, por tanto, que el balón acabara sorteado por el portero al centro del campo, una moneda al aire que no siempre caía del bando albinegro. Con esta premisa perdida, el FC Cartagena perdía muchos enteros, porque los atacantes tampoco llegaban con claridad. Desubicados, tenían que retrasar demasiado sus posiciones para tratar de tocar y llegar. Pato se desgañitaba en la banda, porque pedía más precisión en el pase, que el equipo jugara un poco más junto y que no se sortearan continuamente los balones, obstáculos insalvables para poder elaborar algo más de juego ofensivo.
Pero la presión inicial a la que sometía el conjunto de Estévez a los de Pato se fue diluyendo conforme pasaron los minutos. Esto no arregló la situación. Es cierto que entonces el FC Cartagena se sintió más cómodo. Que algunos de los que apenas habían intervenido en el juego -Rico, Tonino o Rodríguez-, empezaron a cobrar protagonismo.
Entre el minuto 30 y el 45 fue cuando más y mejor enlazó el FC Cartagena su juego. Vino motivado también por un Loja más retrasado. Rico empezó a aparecer por su banda junto a Navarro y puso el peligro en sus internadas. Lo mismo le ocurría a Tonino por la otra banda, mientras que Diego Segura se prodigaba más al borde del área.
Las acciones más destacadas de toda la primera mitad, bastante mediocre para lo que se esperaba, fueron un córner lanzado desde la izquierda por un atacante del Loja, que Víctor conseguía sacar con los pies con apuros.
Por parte del FC Cartagena un cabezazo de Florian, que se marchaba fuera en el minuto 31, y varias ocasiones que desbarató la defensa visitante a disparos de Perona, Rodríguez u Óscar Rico. Lo cierto es que los locales no estaban haciendo demasiado para lo mucho que se esperaba de ellos.
El equipo no mejoró tras el descanso, más bien todo lo contrario. Cada vez más atascado, empezó a levantar las protestas del público que no entendía cómo la pájara podía alargarse tanto en el tiempo ante un rival sin vocación ofensiva y escasos recursos defensivos.
No era el día de casi nadie. Ni Perona ni Rico, Tonino o Rodríguez eran capaces de crear. Florian lo intentaba, era el único que se dejaba el alma en cada acción, pero casi siempre estaba demasiado solo o demasiado lejos del área. El primer disparo entre los tres palos del conjunto local se produjo en el minuto 57, obra, precisamente, del galo.
Riau, en el segundo tiempo
Pato decidió dar entrada a Riau en el carril izquierdo, aunque sus intervenciones apenas mejoraron el juego local. Urzaiz y Dani Nadal -el canterano que debutaba ayer-, fortalecieron el centro del campo. El segundo levantó expectación, porque hacía mucho que no jugaba un cartagenero en el equipo de la ciudad portuaria. Se ganó, por tanto, una de las ovaciones de la tarde en el estadio.
Florian se llevó el premio a su perseverancia y lograba el tanto del triunfo. Una falta botada desde la izquierda, que tropezaba en un compañero suyo, le dejaba el balón libre para que empujara al fondo de las mallas. El francés, a falta de ocho minutos para el final del partido, conseguía abrir la lata. El delantero ex del Sabadell se ha convertido en el más resolutivo para su equipo en estos primeros cinco encuentros. No suele fallar casi nunca, bien sea a través de algún gol -ya suma dos-, una asistencia de gol o provocar una pena máxima, es el más regular y el que mejor rendimiento está dándole al técnico Pato.
Después de su tanto, todo era cuestión de aguantar el marcador y sumar el quinto triunfo de la temporada. El resultado fue lo mejor, en un partido en el que el conjunto cartagenerista tuvo que sufrir en exceso para ganar sin brillar, más bien aburrir durante muchos minutos, a un rival que no desmereció en ningún momento.
