Faltan once días para las elecciones. ¿Cómo ve la cosa?

Creo que la gente va a votar con más información que el 20D. Vemos que Ciudadanos se desinfla, y da risa. Vemos que el PP sigue con sus malas prácticas, y da rabia. Vemos que el PSOE sigue un rumbo, y da pena. En estas elecciones la gente sabe ya que C’s es un partido muleta, que puede apoyar al PP más corrupto en Madrid y al PSOE más corrupto en Andalucía. Sabe que el PSOE está tensionado entre unos barones que quieren un gran acuerdo con el PP y las bases que quieren un acuerdo de cambio con Podemos, que por su parte ya ha dicho que si los votos dan va a proponer un acuerdo con el PSOE para echar al PP. Tenemos mucha más información de como se han comportado todos. Luego está el PP, con su Gürtel, su Bárcenas, sus mensajes a Bárcenas. Si con todo esto hay gente que todavía vota al PP, están diciendo que quieren una España con este nivel de corrupción, algo que a mí me estremece.

Entiendo que haya gente conservadora, pero creo que no existen razones democráticas para votar a un partido que va a leer los votos que reciba como una aprobación de toda su corrupción.

¿Cree que el PSOE apoyaría a Pablo Iglesias como presidente?

Si el PSOE no se quiere convertir en el PASOK griego, debería escuchar a sus bases. Los militantes socialistas son los que están sufriendo las políticas de austeridad, mientras que los barones están más interesados en salvar su posición. Mientras que los dirigentes del PSOE garantizan su ‘modus vivendi’, condenan a los militantes al 'vamus tirandi'. A estar cada vez más empobrecidos.

Ahora Unidos Podemos se sitúa en la socialdemocracia. ¿Usted, que es cofundador, tiene algo de socialdemócrata?

Yo siempre me he definido como un socialista libertario. Ahora, al igual que el diccionario de RAE va a tener que cambiar la definición de matrimonio, la definición de socialdemocracia también varía. La socialdemocracia tenía cuatro rasgos: políticas keynesianas, defensa del estado social, lucha contra las desigualdades y defensa del pleno empleo. Estos cuatro elementos no los está cumpliendo el hoy PSOE, que cambió el artículo 135 de la Constitución, que no hace políticas keynesianas sino que apoya en Europa la austeridad, no lucha contra las desigualdades porque no está a favor de reformas fiscales que hagan pagar más a los ricos, y que hace reformas laborales como la de Zapatero en 2010... El PSOE es el que dejó de ser socialdemócrata.

¿Qué sabe de la Región de Murcia? ¿Cómo la ve?

Me ha preocupado bastante ver que aquí también ocurre lo que hemos visto en el Ebro. El PP roba, despilfarra y envenena el agua. Y esto, en una región como Murcia, tan sensible a las cuestiones medioambientales, me hace estar muy preocupado. Aquí no solo hay corrupción, algo que ya es marca de la casa del PP, sino que, en un lugar muy sensible por vivir de la agricultura y el turismo, que debería ser un espacio de especial atención medioambiental, se está produciendo lo contrario.

¿Volverá a la primera línea política?

No me he ido nunca. Pero en el siglo XXI, la política se tiene que hacer de forma diferente. Nosotros no nacimos para ser un partido más, sino con la voluntad de hacer las cosas de manera distinta. Me pareció interesante el detalle que uno de los fundadores de Podemos no asumiera cargos. Considero que soy mucho más útil haciendo otro tipo de tareas. A veces me pregunto si ha merecido la pena, pues he recibido 14 querellas y Manos Limpias intentó echarme de mi trabajo. Pero me siento muy orgulloso de ser uno de los responsables de poner en marcha esta oportunidad que se nos presenta para revertir este mundo de locura. Cuando Espartaco se levantó, no pensó en si tendría éxito o no. Hizo lo que tenía que hacer.