La capacidad de predecir el futuro, como la inmortalidad o la posibilidad de controlar la mente de los demás, es uno de los poderes más deseados por los hombres de todas las épocas. Brujas, pitonisas y videntes han intentando una y otra vez conseguirlo, pero pocas evidencias hay de sus éxitos. Sin embargo, como en todo, existen casos excepcionales que vienen a confirmar la regla: ayer ocurrió en LA OPINIÓN. Como este periódico venía anunciando, el ilusionista murciano Domingo Artés desveló anoche su predicción sobre los resultados de las elecciones generales. Y acertó en un alto porcentaje.

dejó en poder de los periodistas un pronóstico que, una vez conocidos los resultados oficiales de las elecciones, coincidían -asumiendo el margen de 2 o 3 escaños que el propio mago pidió mantener por el voto por correo y el voto rogado- con lo que predijo el ilusionista. Artés dio en el clavo: adelantó que el Partido Popular lograría 122 escaños en la Cámara Baja (acabaría con 123) y los de las otra siglas, así como el número exacto de sillones con los que se harían las fuerzas en la Región: cinco escaños para el PP, dos para el PSOE, otros dos para Ciudadanos y uno para Podemos.

apel el número exacto de diputados que, según sus cábalas, iban a obtener los distintos partidos en el Congreso. Esa predicción esperó los resultados de los comicios dentro de una caja, que a su vez fue depositada en un maletín al que ´apresaron´ con cadenas y candados. La incertidumbre sobre si el ilusionista sería capaz o no de lanzar una mirada lúcida al futuro se desveló a las once de la noche, cuando el escrutinio, ya avanzado, arrojaba unos datos precisos.

Domingo Artés logró así conseguir uno de sus últimos grandes retos: adelantarse al futuro gracias a un cóctel de «magia, instinto, concentración y corazonada». El ilusionista también había enviado un único mensaje de WhatsApp en el que acertaba los resultados.

El próximo desafío de Artés está alejado de grandes fastos. El mago se ve creando ´una escuela de magia´, «enseñar» a los que le consideran un «maestro» por los más de treinta años que lleva dedicado a uno de los oficios más llamativos del mundo.

Ante la caja que contuvo la predicción y con el propio papel en la mano, Artés lo dijo: «Se trata de crear un legado. Es lo que siento».