El presidente del Gobierno y candidato a la reelección, Mariano Rajoy, decidió suspender el mitin previsto en Murcia debido al atentado que se produjo en la tarde de ayer en la embajada española en Kabul, capital de Afganistán, en el que falleció un policía nacional español.

«No tenemos el ánimo para celebrar un acto así», confesó el candidato popular en la breve alocución que realizó en el escenario preparado para el mitin en el pabellón deportivo José María Cagigal de Murcia, que se quedó pequeño para la ocasión, con cintos de personas sin poder entrar. «A todos muchísimas gracias por estar aquí, es muy emocionante y hermoso y me hace seguir trabajando. Continuaré dando esta batalla; creo que es lo que le conviene a España y estoy convencido de que los españoles me van a ayudar», indicó el jefe del Ejecutivo, acompañado por el presidente de la Comunidad Autónoma, Pedro Antonio Sánchez, el cabeza de lista popular al Congreso de los Diputados por Murcia, Teodoro García Egea, y el presidente del PP en la Región y vicepresidente del Parlamento Europeo, Ramón Luis Valcárcel.

Rajoy tuvo unas palabras de apoyo y agradecimiento tanto al Cuerpo Nacional de Policía, al que pertenecía el fallecido en Kabul, como a la Guardia Civil, señalando que hay que estar «orgullosos» de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, «que nos ayudan, nos cuidan y trabajan por nuestra libertad y seguridad. A todos, muchísimas gracias», indicó el jefe de Gobierno, levantando el aplauso de los asistentes, que lo recibieron al grito de «presidente, presidente».

Rajoy llegó a Murcia procedente de Orihuela, donde se comprometió a una reforma inmediata del sistema de financiación autonómica y reafirmó que el AVE a Murcia, que beneficiará también a los habitantes de la Vega Baja, estará listo «pronto». También se refirió a la falta de agua, que afecta también a la vecina provincia alicantina. «Aseguro que haré cuanto esté en mis manos: Lo posible y si lo imposible fuera posible, que en este caso lo será, para resolver definitivamente un asunto que lleva años sin resolver», afirmó, según Efe.

A su llegada a Murcia, Rajoy ya tenía claro que no se iba a celebrar el mitin. Aprovechó para saludar a los cientos de personas que se habían quedado en la puerta del pabellón deportivo a la espera de poder entrar. «He intentado saludar a todos uno por uno y me he hecho algunos ´selfies´», bromeó el aspirante a la reelección.

Y es que el pabellón Cagigal, con una capacidad para un millar de espectadores, aproximadamente, fue insuficiente para el mitin de ayer. El PP no se atrevió con un escenario más grande, por lo que cientos de simpatizantes que habían venido en autobús desde distintos puntos de la Región se quedaron en la entrada. No ayudó que se instalaran dos grandes lonas para tapar el graderío (las personas que estaban dentro estaban sentadas en sillas dispuestas sobre la pista deportiva). Incluso el cabeza de lista al Congreso, Teodoro García, pasó lo suyo para acceder al recinto por la puerta principal ante la gran cantidad de gente que había fuera.

No tiene suerte el PP murciano con Mariano Rajoy últimamente. En la campaña de las elecciones europeas de 2014 tuvo que ser sustituido por su mano derecha, Soraya Sáenz de Santamaría, en el mitin previsto en Murcia. Y es que días antes había suspendido un acto en Valladolid por el asesinato de la presidenta del PP en León, Isabel Carrasco. El presidente quiso compensar a los pucelanos convocando un nuevo mitin, precisamente en la fecha en la que estaba previsto el de Murcia. En las municipales y autonómicas de mayo participó en un acto público en el mismo escenario de ayer, el pabellón Cagigal, y en otro en el auditorio Víctor Villegas de la capital. Hace poco más de un mes abrió la precampaña en Lorca, donde acudió a clausurar el congreso de NNGG.