Una región que de verdad cambie su modelo productivo. Que al turismo o los servicios sume un impulso reindustrializador en sectores de alto valor añadido. Que avance en serio en la sostenibilidad ambiental y la producción de energías limpias y empleos verdes. Una que apueste por la investigación, la innovación y la educación, con un esfuerzo similar a la media española. Que logre así reducir drásticamente las cifras del paro. Una región en que nadie sea desahuciado, esté condenado a vivir en la exclusión o tenga que emigrar para poder vivir. Que preserve los servicios públicos básicos y la protección social. Una región que destierre la corrupción y se comprometa a mejorar la calidad democrática, con participacion efectiva de su ciudadanía en la vida pública. Una región que planifique y evalúe sus actuaciones, y en la que los responsables políticos respondan de su gestión. Una región que disponga racionalmente de agua y se adapte a la que disponga. Que sea financiada con equidad. Que castigue el despilfarro. Que valore la cultura. Que tenga pluralidad informativa.