La gestión de la sanidad pública ha entrado de lleno en la precampaña electoral para las elecciones municipales y autonómicas del próximo 24 de mayo. Los candidatos de todos los partidos llevan varias semanas organizando encuentros con organizaciones profesionales y otros colectivos para recoger impresiones y lanzar sus propuestas. La sanidad es un sector que sólo en el ámbito público emplea a unas veinte mil personas y que da servicio a toda la población, por lo que las políticas que cada partido proponga pueden determinar el voto de muchos ciudadanos. Precisamente por esto, las asociaciones de usuarios también quieren aprovechar estos días para conseguir un mayor compromiso de los políticos con la sanidad pública. La Marea Blanca de la Sanidad -formada por diferentes asociaciones de usuarios y profesionales-ha propuesto un gran pacto autonómico a todos los partidos con compromisos concretos que se firmará el próximo martes cinco de mayo. Por ahora, ninguno ha anunciado públicamente su adhesión, aunque los guiños son continuos. El mantenimiento de los servicios públicos, la atención universal a inmigrantes o la reducción del presupuesto para conciertos económicos con la sanidad privada son algunos de los puntos de este pacto.

Uno de estos gestos lo hizo ayer el candidato del PP a la presidencia de la Comunidad Autónoma, Pedro Antonio Sánchez, que se reunió con el Sindicato Médico (CESM). Sánchez se comprometió a llamarlos «inmediatamente después de constituirse el nuevo Gobierno», si él lo preside, con intención de ponerse de acuerdo en un calendario de objetivos «conciso» que «redunde en las mejoras de las condiciones de los facultativos y de los profesionales de la Sanidad».

Este encuentro es solo uno más de los que el Sindicato Médico está manteniendo con todos los líderes políticos. El presidente del CESM, Francisco Miralles, valoró que el que Sánchez se haya comprometido a que, si es él el responsable del Gobierno regional, planteará desde el primer día la negociación sobre la carrera profesional. Sánchez considera que el colectivo de médicos ha hecho «importantes esfuerzos en la crisis, y con generosidad», y tanto ellos como los ciudadanos «tienen que recuperar lo que se ha perdido». En su encuentro, tanto Sánchez como los responsables del CESM coincidieron en que el modelo sanitario de la Región debe ser que la Región tenga una Sanidad «pública, universal, gratuita y de extraordinaria calidad» Eso sí, Sánchez dejó también su visión de que «tenemos que poner en marcha nuevos modelos de gestión desde la concertación y desde el acuerdo, para hacer viable y sostenible el modelo».

Por su parte, el candidato a la presidencia de la Región de Murcia, Rafael González Tovar, mantuvo ayer una reunión con la Asociación de Usuarios de la Sanidad de la Región de Murcia, en la que pusieron en común los principales puntos de interés para el mantenimiento y mejora del sistema sanitario regional.

González Tovar, quien ha elogiado el trabajo de «reivindicación, de potenciación y de desarrollo que esta asociación está llevando a cabo» en los últimos años. A ellos les anunció que entre las propuestas socialistas se encuentra la puesta en marcha de un Plan de Urgencias que haga posible acortar los tiempos de asistencia y un plan de choque que acorte las listas de espera.

«Otro de nuestros objetivos es acabar con la desigualdad sanitaria entre las distintas áreas. Las dotaciones en el Noroeste, en el Altiplano o en el Guadalentín deben ser similares. Convenimos con los usuarios de la Sanidad de la Región en la necesidad de reforzar el Hospital del Noroeste en Caravaca, en que es indispensable dotar de unidad de oncología al Hospital Rafael Méndez de Lorca, y en que el Hospital del Rosell debe ser el segundo hospital de Cartagena con todos los servicios», detalló Tovar. González Tovar ha coincidido además en la necesidad de poner en marcha un plan de salud mental, de que la asistencia primaria sea el eje central del sistema sanitario, y hará una ley para evitar la privatización de servicios, detalló el candidato.