La nueva dirección del PSOE liderada por Pedro Sánchez ha dado orden de reconsiderar el apoyo de los socialistas al Tratado de Libre Comercio entre la Unión Europea y Canadá, el conocido como CETA, después de que este mismo martes le diera su voto favorable en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso.

Se trata de una de las primeras decisiones que adopta Sánchez desde que retomó oficialmente las riendas del PSOE en el 39 Congreso Federal del pasado fin de semana y renovara las direcciones de sus grupos parlamentarios.

Cristina Narbona, presidenta del PSOE desde el pasado domingo, ya anunció este miécoles que su partido no apoyaría ese tratado cuando pase por el pleno del Congreso, previsiblemente el jueves de la semana que viene.

"No lo vamos a apoyar", aseguró Narbona en su perfil de Twitter.

La presidenta del PSOE argumentó que este tipo de acuerdos internacionales tienen que redefinirse "para no concentrar más poder en las grandes corporaciones a costa de derechos".

La nueva dirección del PSOE decidirá el lunes finalmente si se abstiene o vota en contra del tratado comercial, que en ciertos sectores de la izquierda se ve como una amenaza a los servicios públicos frente a una protección excesiva de los inversores.

La reunión de la comisión permanente de la Ejecutiva Federal -los 21 secretarios de área que ha nombrado Pedro Sánchez- del lunes próximo en Ferraz tendrá en su agenda la toma de posición de los socialistas en el Pleno del jueves en el Congreso de los Diputados, donde se votará el acuerdo.

Iglesias se felicita

Al conocer la marcha atrás del PSOE, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, se ha felicitado del cambio de postura de los socialistas porque puede ser "un paso" que acerque los acuerdos entre ambas formaciones políticas.