El Tesoro Público ha colocado 2.685 millones de euros en letras a tres y nueve meses, dentro del rango medio previsto, y ha seguido ofreciendo rentabilidades negativas en ambas subastas, aprovechando la estabilidad de la prima de riesgo, que se sitúa en el entorno de los 110 puntos básicos.

A pesar de que los inversores tienen que pagar por los títulos españoles a corto plazo, los mercados siguen interesados en la deuda pública española, ya que la demanda conjunta de ambas subastas ha superado los 7.500 millones de euros, casi tres veces más que lo adjudicado.

En concreto, el organismo público ha colocado 410 millones de euros en la emisión a tres meses, con una demanda que ha superado en más de cinco veces lo finalmente adjudicado. El tipo de interés marginal ha sido algo menos negativo que la subasta previa y se ha situado en el -0,471%, frente al -0,530% anterior.

En la subasta a nueve meses, el Tesoro ha vendido en los mercados 2.275 millones de euros y la demanda ha superado en más de dos veces el importe colocado. En este caso, la rentabilidad ofrecida ha sido aún más negativa, al pasar de un interés marginal del -0,289% al -0,339% en la emisión de este martes.

El Tesoro público no tiene previsto realizar más subastas este mes y volverá a los mercados en febrero, con cuatro nuevas emisiones, dos de letras, los días 14 y 21, y otras dos de bonos y obligaciones, los días 2 y 16 de febrero.