El alcalde de Torre Pacheco, Antonio León, fue el encargo de dar el pistoletazo de salida a la trigésimo octava edición del Festival de Cante de Lo Ferro, en una noche -la del pasado martes-, que tuvo en el pregón de Antonio Carrión, guitarrista oficial del festival, su momento más emotivo. Pero faltaba el cante, y llegó de la mano de un joven valor que está luchando por hacerse un hueco en el mundo del flamenco, Manuel Cuevas hijo, quien ofreció una pincelada de su arte por soleá, alegrías, seguiriyas y fandangos. Tras él, una agradecida María Vargas recibió la Medalla de Oro del festival y regaló al público asistente su cante puro. Desgranó, junto al toque mágico de Antonio Carrión, alegrías, fandangos y firmó un fin de fiesta por bulerías con el acompañamiento al compás y palmas con Paco Cepero y Rancapino Chico.
