Desde el pasado mes de abril de este año a reabierto sus puertas la estafeta de correos más divertida, de la mano del hostelero Rafael Abellán Paredes (del Código) y Felipe Herrero Zúñiga, y con la ayuda tras la barra de Joana, Rodica y Adrián los fines de semana.

En esta nueva etapa de La Posada de Correos sus responsables han querido mantener la esencia del antiguo local que estuvo abierto más de cuatro años, la estafeta de correos británica first class más murciana de la historia. Situada justo al lado del antiguo edificio de Correos, en la calle Simón García, en lo que fueran las caballerizas del palacio del Conde de Floridablanca, junto al hotel Arco de San Juan.

Su decoración recrea una auténtica estafeta de correos británica de hace siglo y medio, en lo que constituye un originalísimo espacio multidisciplinar donde desayunar, tomar unas pintas, cafés, asiáticos, café irlandés, capuchino, frappuccino, infusiones y tés elaborados de todo tipo, cócteles mojitos o excelentes y bien servidas copas de calidad.

En el local, profusamente decorado con motivos postales, no faltan un auténtico buzón rojo británico, mesas estampadas con todo tipo de sellos y hasta box de apartados postales a la entrada del baño. Bien merece una visita, vayamos o no a enviar una postal. Aunque ello no será necesario porque podemos enviar en cualquier momento un email, puesto que también disponen de red wifi gratuita.

Puntualmente organizan sesiones de monólogos y actuaciones de magia, tandems de inglés y sesiones de citas rápidas o speed datings.

Cuentan con más de veinte referencias de cervezas como Guiness, Murphy, Paulaner, Desperados, Amstel o Alhambra. También disponen de pantalla gigante desde la que emiten todos los partidos y eventos deportivos.

Cuentan con asiduos clientes con una media de edad de treinta años, amantes de la cerveza, las buenas copas o los cócteles como el Coco loco, margaritas, daiquiris, Tom Collins, smuffis, batidos... así como los especiales de Oreo o de Kinder Bueno.