El Museo de Bellas Artes de Murcia huele a pintura, a espray; suena como el chaqueteo de los botes de aerosol en las manos de los siempre cuestionados artistas del grafiti, acosados por la eterna pregunta: ¿Arte o vandalismo?, y perseguidos en ocasiones por las autoridades o, en el mejor de los casos, los más puristas entre los críticos de arte. Pero desde hace algunos meses, Murcia se ha posicionado. Con una política firme en cuanto a los tags realizados sin el consetimiento de los propietarios de los muros -recordemos que la capital del Segura es la primera ciudad de España en contar con una Oficina del Grafiti, que tiene como uno de sus principales objetivos la lucha contra estas pintadas-, se ha volcado en defender aquellas firmas ´legales´, a aquellos jóvenes que disfrutan de esta forma de expresión, eso sí, siempre bajo el respeto a la ciudad, sus calles y sus edificios. Bajo esta misión se enmarcan algunas de las iniciativas de la propia Oficina (como ´12 meses, 12 muros´), la actuación del brasileño Kobra en el Puertas de Castilla o la exposición recientemente clausurada Arte urbano. De la calle al museo.

La citada muestra, además de recoger en el Mubam obras de algunos de los más reconocidos artistas urbanos y grafiteros del mundo (como Blek Le Rat, Obey, Cope2 o Futura 2000), trajo a Murcia firmas de calado en el mundillo del aerosol, que bajo el amparo del Ayuntamiento y la Consejería plasmaron su arte en diferentes rincones de la ciudad, mientras que otros lo hicieron en directo en el patio del museo. Ahora, éstas últimas cuelgan de las paredes del Mubam a modo de continuación bajo el título Arte urbano. En la puerta del museo, que reúne 24 piezas de grandes dimensiones (250 x 244 centímetros) firmadas, entre otros, por creadores como el brasileño L7M, que inició las intervenciones con una espectacular cabeza de águila; los británicos Dale Grimshaw y Pang, y los artistas de la Región Kraser y Carlos Callizo.

Las técnicas usadas por los participantes incluyen aerosoles, esmaltes y otras en una actividad «que ha tenido una gran acogida, con numerosas personas reunidas en la puerta del museo para disfrutar del proceso de creación de la obra», explicó el consejero Javier Celdrán, quien destacó durante la presentación de la exposición el éxito de la muestra matriz, que recibió a más de 19.000 personas «convirtiéndose en una de las más visitadas de los últimos años en los museos regionales».

El responsable de Cultura destacó, además del alto número de visitantes, «la gran cantidad de grupos de colegios e institutos que han acudido al Mubam; niños y jóvenes que participaron en visitas y talleres organizados para acercarles a la cultura a través del arte urbano, una disciplina que les resulta más cercana y familiar y que se está convirtiendo en fundamental en este siglo XXI».

Junto a las obras de los creadores ya nombrados también se exhibirán hasta el 3 de septiembre las de otros artistas internacionales como SoFreeSo (Suiza), Draw (Portugal), Vesod y Refreshink (Italia), Freaks the Fab (Francia) y Gisel Rosso (Argentina), quienes ofrecerán una mirada a las tendencias europeas y latinoamericanas dentro del arte urbano. La colección, con numerosos retratos, piezas abstractas y otras centradas en animales, se completa con los españoles Mr. Ze, Lily Brik, Zaiman, Feoflip, Kob, Mr. Chapu, Xav y Mario Mankey y otros artistas de la Región de Murcia como Toren, Goyo, Pigüo, Rayajos y Nels.

Y es que parece ser que la apuesta decidida de la ciudad por el mundo de grafiti está dando sus frutos. El consejero confía en que «exposiciones como las de arte urbano, junto a otras propuestas innovadoras como Gastroarte, por ejemplo, están contribuyendo a atraer a un nuevo público a nuestros centros, cada vez más abiertos a la sociedad, no solo gracias a sus exposiciones, sino con la realización de numerosas actividades que hacen que los museos se conviertan en el centro de la vida cultural de la ciudad». Además, según Celdrán, esta nueva muestra responde a una petición expresa de los propios visitantes del Mubam, lo que viene a confirmar -más allá del elevado número de asistentes- la gran acogida que está teniendo esta política. «El público que ha asistido a las intervenciones, así como numerosas personas a través de las redes sociales, han pedido poder ver las obras ya finalizadas y reunidas en un mismo espacio». Por ello, añadió, «hemos organizado esta nueva muestra que pone fin al proyecto sobre el arte urbano, que ha contribuido a acercar esta disciplina artística al gran público, apartando los prejuicios y demostrando su calidad».

Arte urbano. En la puerta del museo se puede visitar en el Mubam de martes a viernes, de diez de la mañana a dos de la tarde, y los sábados, domingos y festivos, de once a dos.

Aunque los grafitis quedan bien en las paredes de un museo, su localización natural son las calles. Incluso, son muchos los artistas que se niegan a mostrar sus piezas en pinacotecas. Por eso, durante los últimas meses, no solo el patio del Mubam ha servido para que firmas de renombre internacional hagan las delicias de los aficionados al arte urbano. Así, la británica Pang ha dejado tras su visita a Murcia un grafiti de 16 metros en la calle Sardoy; los vallisoletanos Mr.Zé y Kob, un mural conjunto de unos 30 metros cuadrados en la fachada de la Federación Regional de Empresarios del Metal de Murcia (FREMM), en la calle del Metal, zona por la que el también británico Dale Grimshaw también actuó el pasado mes de abril. L7M, Sofía Frey, Lilly Brick, Carlos Callizo, Freak The Fab y Manyoly son otros de los artistas que se han propuesto llenar de color las calles de la capital regional.