Bajo este misterio se bajaran estas tres hipótesis, ya que hace miles de años no estábamos allí para verlo.

Existen hasta ahora tres teorías o postulados en cuanto al origen de las asanas:

El más antiguo y tradicional establece que la asanas surgieron desde los primeros asentamientos en la zona del norte de la India, el Valle del Indo alrededor de 3.000 años a.C. Esta teoría solo está basada en figuras en miniatura que representan a hombres sentados con las piernas cruzadas, encontradas en las excavaciones de Harappa y Mohenjo Daro, lugares donde se asentaron las civilizaciones antiguas de India.

Una segunda teoría establece que los ascetas al retirarse de la vida convencional podían contemplar en las selvas y bosques el comportamiento de los animales y plantas, observando, por ejemplo, como un animal salta y qué músculos contrae y cuales relaja, o como una cobra se mantiene en quietud. Las asanas, desde esta perspectiva, surgieron de un deseo de imitar las diferentes formas de la naturaleza para desarrollar un sentido de interconexión con todas las manifestaciones de naturaleza o simplemente como un juego creativo para desarrollar cualidades que se le adjudicaban a estos animales. Esta teoría solo se basa en relatos de carácter oral.

Una tercera teoría, muy reciente, plasmada en el libro de Mark Singleton, Yoga Body, plantea que las asanas son el resultado del encuentro de India con Europa y el intercambio de conocimientos entre ciencia, danza, acrobacia y gimnasia. La base de esta hipótesis es, principalmente, la comparación entre dibujos, daguerrotipos y fotografías, así como una meticulosa investigación documental.

María Mineth. es directora de Organic Yoga Www.educacionorganica.es