A mediados de la década pasada, el balonmano desapareció de Águilas. Atrás quedaban esos años donde Salvador Palazón, Raimundo Jiménez o Fernando González llenaban el Pabellón Agustín Muñoz de niños y niñas dedicados a un deporte que tuvo mucha solera en la localidad.
El Club Balonmano Águilas, fundado en 1973 y considerado uno de los más antiguos de la Región, estaba condenado a renovarse o morir. Hasta que aparecieron unos 'locos' por este deporte que, impulsados por su amor al balonmano y agradecidos por lo que el club les había concedido en su etapa como jugadores, decidieron empezar a trabajar desde abajo, desde los colegios.
Lorenzo Alonso, Rubén Gálvez, Jacinto Buitrago y Antonio González comenzaron, junto con Fran Sánchez, a trabajar con una liga local escolar, que abrió el camino para llegar actualmente a contar con nueve equipos federados y a ganar cinco títulos regionales. Ahora, el l equipo senior femenino ha recuperado a jugadoras Lidia Jiménez, Raquel Navarro, que vienen División de Honor.
