Alberto Monteagudo pierde para el resto de fase de ascenso a Segunda División al cartagenero Sergio Jiménez, que ha sido suspendido con cuatro partidos por el Juez Único de Competición, que resuelve este tipo de asuntos en la Segunda División B.

El jugador fue expulsado tras anotar el Rayo Majadahonda el gol que le dio el ascenso a Segunda, según el colegiado, por «agredir a un rival con el puño no estando el balón en juego». Bajo esta tesitura y a pesar de que el club albinegro reaccionó rápidamente y envió un vídeo en el que trata de demostrar que a pesar del incidente no hubo agresión, Competición se ha atenido a lo que expuso el colegiado del partido y aplica el artículo 98.1 del Código Disciplinario de la RFEF, que dice lo siguiente: 'Agredir a otro, sin causar lesión, ponderándose como factor determinante del elemento doloso, necesario en esta infracción, la circunstancia de que la acción tenga lugar estando el juego detenido o a distancia tal de donde el mismo se desarrolla que resulte imposible intervenir en un lance de aquél, se sancionará con suspensión de cuatro a doce partidos'. Aplica, de esta manera, la sanción más leve, aunque ésta supone un auténtico varapalo para los intereses del conjunto albinegro, que necesita aún cuatro partidos más para tratar de dar el salto a la Segunda División tras quedarse fuera en la fase de campeones.

El propio jugador albinegro reconocía horas después del encuentro que había tenido un percance con un jugador rival, aunque aclaraba en un tuit lo siguiente: «Ver que un jugador se está riendo de mi afición me ha dolido y no he podido ir a por él, pero sin agredirlo, sabiendo que ahora vienen más partidos».

Y es que tras el tanto en propia puerta de Zabaco, el jugador del Rayo Majadahonda Ayoub se quitó la camiseta y se dirigió a los aficionados albinegros. Se puso de rodillas celebrando el tanto en un claro intento de provocar a los seguidores cartageneristas. Sergio Jiménez, que se lamentaba tirado en el suelo, vio la acción del jugador rival y se dirigió hacia él para recriminarle la misma.

Decía Sergio Jiménez en su cuenta de twitter, tras conocerse la dura sanción, que: «No entiendo nada, ya que se ve claramente en el vídeo que no hay agresión», para añadir que: «Me toca animar desde la grada, con vosotros. Mis compañeros lo van a conseguir lo tengo claro».

El próximo paso que podría adoptar la entidad cartagenerista es presentar un recurso al Comité de Apelación, última instancia dentro de la RFEF para que revise las pruebas y el acta y decida si mantiene la sanción, la suspende cautelarmente o la modifica en un sentido o en otro. Desde el club se ha informado que será éste el siguiente movimiento.

La realidad es que esta sanción supone un duro varapalo para el propio jugador y para los intereses del conjunto albinegro, que pierde a uno de sus pivotes en medio campo en los cuatro partidos que le restan en el dificilísimo camino hacia la Segunda División. Si bien el jugador no estaba siendo habitual en el once inicial, sí que ha disputado muchos minutos a lo largo de la temporada. La irrupción de Cordero en la segunda vuelta de la competición regular le ha lastrado la posibilidad de saltar de inicio, aunque sigue siendo un futbolista referente en el medio campo del equipo cartagenerista. Su ausencia a partir del próximo domingo limita las opciones en esa parcela y los posibles recambios en caso de que su compañero volviera a ser amonestado. Monteagudo cuenta con un buen ramillete de jugadores en posiciones similares, aunque la mayoría de ellos tienen un corte más ofensivo -Chavero, Benito, Cristo Martín-. Adama, por su parte, no ha vuelto a participar en el primer equipo desde que se lesionara a mitad de temporada. Es el jugador del filial una opción, aunque su falta de ritmo en esta competición podría resultar el principal lastre para ser convocado este domingo en la visita del equipo a Vigo.

Varios frentes abiertos

El preparador tiene ante sí varios frentes abiertos para que su equipo llegue en las mejores condiciones físicas al encuentro. Recordemos que a la baja de Sergio Jiménez por sanción se le podría unir la de Rubén Cruz u Óscar Ramírez, ambos con problemas musculares. El club prefiere ser cauto en su dictamen médico en el caso de los dos jugadores y esperar a ver cómo evolucionan de sus respectivas dolencias, antes de que el equipo médico y el propio entrenador decidan qué ocurrirá con los futbolistas.

La plantilla tiene todavía dos sesiones de trabajo más en el Cartagonova antes de partir rumbo a tierras gallegas.