­El UCAM Murcia despidió la temporada en La Condomina a lo grande, respecto a la imagen mostrada por el equipo sobre el terreno de juego frente al Marbella (2-1). Pero lo hizo en el momento más inoportuno, cuando no se jugaba nada más que alejar a los lejanos fantasmas que aún podían conducirle hasta el puesto de play out de descenso. Los universitarios, al menos, salvaron el honor tras una segunda vuelta para olvidar y una nefasta racha de siete semanas consecutivas sin saborear el triunfo. De hecho, seis jornadas ha necesitado Pedro Munitis, quien debía ser el técnico encargado de llevar al equipo al play off, para sumar su primera victoria al frente del equipo murciano. En líneas generales, jugadores, cuerpo técnico y directiva se despidieron de una desencatada afición (poco más de 1.500 personas ayer en La Condomina) dejando una buena imagen.

Se estrenó Onwu como goleador, quien también llegó tarde a la cita, además del centrocampista Vivi, y un UCAM con muchas rotaciones forzadas por las bajas se mostró claramente dominador sobre un Marbella que se juega nada más y nada menos que el liderato. Ese primer puesto, que ostenta el FC Cartagena, queda en bandeja para el conjunto albinegro, ya que el Marbella fue incapaz de presumir de su poderío ofensivo durante los noventa minutos del partido. Solo Chus Hevia, aprovechando un rechace, consiguió incomodar a Esteve, y lo hizo para marcar un gran gol que no sirvió más que para maquillar el resultado en los últimos instantes.

Notó el UCAM la falta de tensión que le inculcaba el tener que luchar por los puestos de play off, y de forma liberada y pausada, marcó los tempos del juego mostrándose dominador con la pelota en los pies. Combinativo y preciso con el pase, sorteó cada una de las línas defensivas del Marbella con velocidad y concisión. Avisó Colinas en dos ocasiones, pero fue en el minuto 14 Manu Onwu el encargado de abrir la lata para los universitarios. Entre Colinas e Isi Ros fabricaron la jugada, lo que permitió al de Las Torres de Cotillas adentrarse por el pico del área y servir hacia la frontal para el delantero del UCAM. De primeras, fusiló por bajo a un Wilfred que ni la olió.

Víctor García e Isi Ros, de nuevo por la izquierda, volvieron loco al lateral Carlos Julio con sus constantes internadas. De hecho, Víctor García estrelló el balón en la madera con una preciosa definición desde la frontal. El UCAM, tras el paso por vestuarios, siguió manejando con buen criterio el ritmo del partido, aunque la fatiga facilitó algunas apariciones del Marbella por el área, de forma esporádica. Los universitarios quisieron sentenciar, y gracias a un remate de cabeza de Vivi tras córner botado por Góngora, los locales ampliaron la ventaja en el minuto 71. Pese a ello, el Marbella siguió abusando del juego duro, lo que propició la expulsión del central Lolo Pavón. Solo Chus Hevia, aprovechando un despeje de la zaga, logró superar a Esteve con una volea exquisita. El UCAM mantuvo la calma, el Marbella se marchó con las manos vacías, y La Condomina dijo adiós a un curso para olvidar desde hoy mismo.