Los tres puntos que sumaba el FC Cartagena a domicilio ante el Real Betis B suponen la vuelta al liderato en el Grupo IV de Segunda División B, tras ocho jornadas al acecho del Marbella. El equipo malagueño pinchó en su visita al CD El Ejido, lo que hace que los albinegros vuelvan a estar en lo más alto, con dos puntos de ventaja sobre los marbellíes.

Los tantos de Chavero y Rubén Cruz aúpan a un Cartagena que era muy consciente de la importancia de una victoria en casa de un equipo con demasiados problemas para especular con el resultado. Al Betis B solo le valía ganar, porque con un penúltimo lugar en la tabla clasificatoria los puntos se convierten en un botín muy preciado.

El bloque entrenado por Alberto Monteagudo salió como un cohete al campo Luis del Sol de Sevilla con la intención de coger en una de sus salidas al Betis B. Lo consiguió muy pronto. Antes de cumplirse el primer minuto fue Rubén Cruz quien tuvo en sus botas el 0-1 tras robo de balón, llegada de Cristo y pelota para el goleador. En esta ocasión el sevillano impactaba el esférico en las piernas de Pedro, que evitó que el Cartagena tardara poco menos de un minuto en marcar.

Pero el que no perdonó fue Chavero, quien tras un largo centro de Óscar Ramírez desde la derecha hizo el 0-1, al mandar con su pierna al fondo de las mallas un disparo raso que no pudo ver el meta local.

El bloque albinegro había hecho lo más complicado. Ahora tocaba saber leer las circunstancias de un partido que se le ponía de cara muy pronto y aprovecharse de la ansiedad de un Betis B que necesitaba la victoria para arañar los puntos que le lleven a la salvación. Es por eso por lo que los verdiblancos no tuvieron otra que dar un paso adelante nada más verse por detrás en el electrónico.

Uche anotó en el minuto 10 en una rápida acción a la contra, pero el colegiado vio fuera de juego -la repetición por televisión así lo demostró-, y el Cartagena se evitaba de esta forma ver empatado el choque.

Los albinegros salieron con tres futbolistas en medio campo: Sergio Jiménez andaba más retrasado, mientras que Chavero y Cordero saltaban un escalón por delante para tratar de tener más presencia en medio campo y evitar las transiciones rápidas del equipo local.

Sergio Jiménez volvía a cuajar un gran encuentro. Abarcó mucho espacio, presente en cada disputa dentro de su campo de acción y un buen escudero a la hora de recuperar para atacar.

El Cartagena no sufría a pesar de que no terminaba de tener el esférico controlado. A la media hora de partido Mejías -otro de los futbolistas destacados del bloque albinegro en la tarde de ayer- quitaba con la punta de la bota el balón a Abreu cuando éste encaraba la portería de Pau Torres.

El gol tan tempranero le quitó al bloque de Monteagudo cierta dosis de tensión. No es que sufriera en exceso, pero no terminaba de cuajar una ocasión clara de gol. El Cartagena se sentía cómodo porque el oponente no inquietaba y todo estaba a falta de apuntillar en alguna acción ofensiva.

También es cierto que los verdiblancos no tenían otra que intentar buscar el gol por todos los medios y con la necesidad perentoria que te da la clasificación, pero se encontraron a un Cartagena que en la primera parte apenas les concedió una ocasión.

En la segunda parte no cambió tanto el panorama, pero el Betis B azuzó a un FC Cartagena quizá más adormecido que en la primera parte. El bloque albinegro no iba para adelante, se agazapó más y cometió el error de darle vida a un Betis B que aprovechó para acercarse con peligro a las inmediaciones de la portería de Pau Torres.

Conforme pasaban los minutos los de Monteagudo tenían claro que debían aguantar las embestidas del oponente y evitar el gol en los últimos minutos. Sin embargo, no fue así, porque un robo de balón en medio campo albinegro supuso que Aitor superara por velocidad a Sergio Jiménez y cediese a la izquierda para Abreu. El atacante disparó centrado pero fuerte y Pau Torres nada pudo hacer para evitar el tanto cuando faltaban 12 minutos para el final del partido.

Volvía a empezar de nuevo un partido de apenas diez minutos, con un Cartagena que necesitaba despertar de ese letargo en el que vivió en la segunda parte para que no se le escapara la victoria.

Ya en ese momento Monteagudo había decidido mover el banquillo. Obligado fue el campo de Jesús Álvaro, que se encontró demasiado cargada la pierna y pidió el cambio. Morros saltaba al campo por el canario, mientras que Owusu lo hacía por un Hugo Rodríguez menos protagonista en esta jornada.

La salida del africano al campo fue crucial. Y es que tres minutos más tarde del tanto anotado por Abreu llegó la reacción albinegra con Rubén Cruz de protagonista. El sevillano, que había pasado casi desapercibido hasta ese momento en labores ofensivas, recogía un balón que Owusu le cedió perfectamente con el pecho.El pase al ghanés le llegó en largo de Óscar Ramírez. En estas que Cruz, con el balón dentro del área, remató fuerte y el balón antes de entrar tocó el césped y picó hacia arriba, lo que hizo imposible la estirada del portero verdiblanco.

El Cartagena ya no permitiría más que el Betis B se acercara a la meta de Pau Torres. Supo, entonces, manejar el choque en estos cerca de quince minutos que se alargó el enfrentamiento para lograr una nueva victoria.

El Cartagena perdió el liderato el pasado 25 de febrero. Han transcurrido dos meses para que vuelva a retomarlo. No ha perdido nunca la esperanza de volver a lo más alto y a pesar del tropiezo ante el Real Murcia hace dos jornadas se ve arriba otra vez.

A tres jornadas para el final del campeonato regular, ahora solo depende de sí mismo.