José María Salmerón sabe que tenía dos partidos señalados en rojo antes de encarar las últimas jornadas y el primero de ellos resultó ayer muy favorable para los intereses del Real Murcia. Primero era la visita del Cartagena y el próximo domingo toca el Extremadura, otro rival duro que quiere estar en Segunda el siguiente curso. Tras ganar ayer al Cartagena de manera solvente, Salmerón estaba feliz y se atrevió a hacer algo a lo que no acostumbra el almeriense, a realizar cuentas, ya que el extécnico del UCAM dijo tras salir vencedor del gran derbi regional que «si le ganamos al Extremadura el siguiente partido podremos pensar en los primeros puestos de una forma más o menos segura».

«Ha sido una primera parte muy buena por nuestra parte y hemos apretado arriba a nuestro rival. Además, se ha producido un gol legal que nos han anulado. Sin embargo, el gol que hemos encajado en el minuto 42 sí nos ha hecho daño y todo el mundo ha visto que en la segunda parte nos hemos dedicado a estar un poco más juntitos», dijo el máximo responsable del banquillo grana.

Sobre los minutos de la segunda mitad en los que los granas parecieron estar más despistados que en el primer acto, su técnico comentó que «nos ha faltado un poco de frescuar y se ha notado un poco. De hecho hemos llegado al tramo final un poco justos de fuerzas».

Aunque la defensa del Murcia fue cediendo terreno poco a poco, Salmerón explicó en sala de prensa cuál era la consigna para tratar de frenar la gran racha goleadora en la que llegaban tanto Aketxe como Rubén Álvarez, ya que ayer solo el segundo vio puerta en una acción de estrategia: «Sabíamos que tienen dos delanteros muy buenos en el área y por eso intentábamos estar lo más lejos posible, aunque tampoco he visto ninguna ocasión de gol peligrosa que nos haya puesto en apuros. Siempre queríamos alejarnos lo máximo posible de nuestra área, pero se trata de un aspecto que tendremos que seguir trabajando porque en definitiva tenemos que defender más lejos de nuestra portería».

El tanto albinegro antes del descanso provocó que el Murcia saltara al campo con cierto nerviosismo que no le permitió soltarse hasta el pitido final del colegiado. Así lo vio también el propio Salmerón, quien siempre ha hecho referencia a que la necesidad tan grande de ganar, algunas veces, atenazaba al equipo. «La sensación psicológica de que nos da miedo tener el balón nos provoca que tengamos más problemas a la hora de finalizar. Al no llegar el tercer gol y tener que asumir riesgos ellos se han puesto a buscar los centros laterales para hacernos daño. Por este motivo hemos decidido dar entrada a David Mateos en este tramo final, porque su experiencia nos daba seguridad en este sentido».

«En el fútbol a veces se producen cosas que no esperas y nosotros trabajamos siempre las jugadas de estrategia, pero ha sido ante un rival que no había encajado goles de esta manera cuando nos ha salido bien lo ensayado», concluyó un Salmerón que cada semana que pasa sabe que tiene un poco más cerca un objetivo que parecía casi inalcanzable cuando el almeriense aterrizó en Nueva Condomina para tratar de sacarle partido a una plantilla descompensada y a un equipo que no sabía muy bien qué plan poner en marcha sobre el césped hasta la llegada de Salmerón, quien ha priorizado la fortaleza defensiva del equipo hasta el punto de que hacerle un gol a los granas es mucho más complicado que a otros rivales.

Al final Salmerón optó por un once más o menos esperado en el que David Sánchez, Armando y Juanma llevaban la voz cantante desde ese centro del campo que tan buen rendimiento le está dando al Murcia. Otra cosa distinta será el momento en el que se recupere al cien por cien David Mateos, un central al que Salmerón le gusta utilizar en el pivote y que, cuando ha estado bien, ha provocado que David Sánchez vea los partidos desde el banquillo. El único jugador de baja es el extremo Carlos Martínez, aunque las prestaciones de Santi Jara hacen que ahora mismo el exjugador del Racing de Santander esté por delante que los compañeros que compiten por su mismo puesto.