Los aficionados del FC Cartagena se encontraron a primera hora de la mañana del lunes con la noticia de que el Real Murcia les impedía el acceso a Nueva Condomina con elementos que pudieran ser susceptibles de ser lanzados al campo -como palos de banderas- y otros como bocinas o bombos.

La indignación entre los seguidores fue creciendo conforme pasaban las horas, ya que no entendían que este tipo de cortapisas contribuya al 'fair play' que tratan de pregonar en una semana como esta del derbi.

Tras el revuelo presente entre los aficionados del club albinegro, los miembros de seguridad del conjunto murcianista reculaban unas horas más tarde para permitir el acceso al campo con banderas y bombos.

De esta manera «sí podrán entrar banderas de mano con palo de PvC flexible (tal y como se regula en la ley) y bombos (con maza unida a bombo y acreditándose con DNI el portador del mismo)», indicaba Pencho Angosto, miembro de la Federación de Peñas del FC Cartagena.

Sigue estando prohibido el acceso a las gradas del recinto deportivo murcianista con pancartas y cubregradas sin certificado ignífugo

Los seguidores de uno y otro lado han llevado sus pancartas, escudos y banderas, además de bombos y bocinas sin ningún tipo de problema, porque, además, estos no han causado hasta ahora percance alguno en los encuentros disputados entre cartageneros y murcianos.

Entre los aficionados del club albinegro se consideraban exageradas las medidas tomadas por los dirigentes granas, sobre todo porque en los antecedentes no hay nada que motive esta determinación.

Pencho Angosto recordaba, por otro lado, que no recuerdan que en ningún campo de fútbol los clubes les habían puesto tantas cortapisas a la hora de introducir elementos para animar a su equipo como los que ha establecido el club grana para este enfrentamiento.

A pesar de todo, los aficionados del conjunto cartagenerista se desplazarán en un gran número para ver el choque en Nueva Condomina. La estimación, en estos momentos y a cinco días del encuentro, es que alrededor de 2.500 aficionados llegados desde Cartagena se desplace para ver el encuentro en el campo murcianista el domingo.