Un partido sobresaliente en defensa, un Raúl Jerez que lo paró todo en la tarde de ayer y la efectividad de Drahovsky fueron los astros alineados para derrotar el Plásticos Romero al Barcelona por un contundente 5-2, y sumar así tres puntos importantes ante uno de los equipos que marcaran la diferencia en la elite del fútbol sala nacional.

Nada más saltar a la cancha de una abarrotada pista en el Palacio de los Deportes, el conjunto visitante no dio ni un respiro al local, presionando en la zona de creación de los locales. Sin embargo, los blanquinaranjas intentaban circular con rapidez el balón en la pocas posesiones que disfrutaron en los minutos iniciales.

A pesar de la autoridad que imponían los blaugranas, el conjunto local no se descomponía. Además, las contras podían ser el arma para el Plásticos Romero, ya que el quinteto visitante buscaba con intensidad llegar a las inmediaciones de Raúl.

Si la primera oportunidad para el Barcelona llegó a los 4 minutos, la primera ocasión local apareció a los 8 minutos, cuando Casas lanzó un tiro de falta que salió rozando el poste de la meta defendida por Juanjo. El conjunto dirigido por Andreu Plaza insistía en su ataque, mientras que el Plásticos Romero defendía muy bien en su zona, pero la sensación era que los visitantes podían marcar en cualquier momento.

El Barça iba metiendo en su cueva al Plásticos Romero, hasta que Guillamón dispuso de su tiempo muerto a los 10 minutos, momento en que el equipo local reaccionó y subió la intensidad al biorritmo del partido. Con esta aceleración en la velocidad y confianza, el Plásticos Romero encontró el primer tanto de la tarde, donde Drahovsky inauguró el marcador tras un detalle técnico que dejó a la defensa blaugrana a contrapie.

Tras el 1-0, los locales se anticipaban mejor a sus oponentes provocando que el Barcelona bajara el nivel de presión en ataque y estuviera algo más disperso en pista.

La jugada polémica del encuentro llegó fuera del primer tiempo. En una más que discutida decisión, el colegiado Moreno Durán pitó, ya con el tiempo cumplido, dos faltas en una misma acción en contra del Plásticos Romero. Los jugadores reclamaron que al menos una ya estaba fuera de tiempo, con el electrónico a cero segundos, algo que al parecer le dio igual al colegiado. Al final, el lanzamiento de Dyego lo rechazó Raúl.

La segunda parte comenzó de las mejor manera, ya que Drahovsky volvió a hacer diana, al enchufar un derechazo a saque de un córner poniendo el 2-0 en el marcador. Un minuto más tarde, fue Jesús Izquierdo quien dispuso de un uno contra uno, pero fue bien tapado por Juanjo. Con este marcador, el Barcelona estiró las líneas y abrió bandas, haciendo circular el balón en los límites, pero sin tener una verticalidad inquietante. Mientras tanto, los albinarajnas seguían con su partido en defensa para tratar de salir en las contras.

Con este tanteo, el crono avanzaba y aunque el juego pasó por momentos muy planos, estaban por llegar los minutos cruciales. El Barça se encontraba cada vez más incómodo sobre la pista y además, a los 33 minutos, Drahovsky daba otro zarpazo, tras una gran acción protagonizada previamente por Rahali en banda izquierda. El tanto suponía un más que notable 3-0 en el marcador. Este tanteo hizo reaccionar al técnico blaugrana y comenzó a jugar de cinco. Con esta estrategia, el Barcelona acortó distancias con un tanto de Esquerdinha a falta de seis minutos para el final.

Pero el Plásticos supo sacudirse muy bien la presión del rival, golpeando por cuarta vez con el gol de Rahali, que ya cerraba el partido, haciendo que los tantos de Juanpi por el Plásticos Romero y de Xavi Cols quedaran ya como anécdotas en el banquete que se dio en la tarde de ayer el Plásticos Romero en el Palacio de los Deportes de Cartagena. La parroquia local disfrutó de uno de los mejores resultados que se han dado en la historia del club cartagenero en Primera División.

Además, con estos tres puntos, el equipo cartagenero se distancia a ocho puntos del noveno clasificado.