El UCAM y el Real Murcia disputan mañana (12.00 h.) un partido que siempre se recordará. Bien por el resultado, bien porque es el único duelo en la Región que se puede tildar de derbi, bien porque se parecerse cada vez a más a aquellos Murcia-Ciudad, que fueron desfile de pasión y en donde ambos salían siempre con el cuchillo entre los dientes -recordemos la última grave lesión que padeció Acciari en uno de ellos-.

En esos enfrentamientos también fue cesado algún que otro entrenador -el caso de Casuco- por no ganar al rival. Llega el partido con sensaciones similares. Ambos necesitan ganar y romper la dinámica negativa (los universitarios llevan tres partidos perdidos consecutivamente y el Murcia quiere olvidarla derrota ante el Melilla. El partido de la primera vuelta acabó en victoria azul y con la expulsión de Santi Jara, que no estará en este duelo.

Entre la ilusión y la esperanza navegan algunas de las claves de un derbi en donde los aficionados esperan ver un gran partido. A continuación analizamos algunas claves de un enfrentamiento que no quiere perderse nadie.

1. EL ESTADIO: La Condomina, de grana a azul

El factor local del campo no es fundamental para los dos. A ninguno de los dos equipos -dicho con la boquita pequeña- le gusta jugar al calor de su afición. El UCAM, en casa, ha disputado 32 puntos de los que ha ganado quince (5 victorias), empatado tres (3 puntos) y perdido otros tres. Estos número son casi igualados por los granas, cinco ganados, tres empatados y tres perdidos de los 29 que ha peleado. Por su parte, el Murcia no gana en NC desde el 25 de octubre (1-0) frente el Badajoz. Los universitarios no lo hacen desde el 7 de enero (2-0).

El Murcia, en campo foráneo, es de los mejorcito del grupo, con cinco victorias (una menos que el Cartagena), pero los granas han empatado, cuatro y perdido tres, los mismos que el líder. Desde el 11 de noviembre (2-1 en Cartagena), y antes el 21 de octubre, el día que debutó Salmerón ante el San Fernando, no han perdido fuera.

Pero esta salida será diferente.Visitarán los granas La Condomina de siempre, un estadio del que posiblemente se acuerden mucho más los viejos murcianistas que incluso de la actual NC, en donde el césped de lujo, un campo de amplitud ideal para jugar, y con unas gradas poco presionantes, es ideal para el Murcia de hoy.

2. LAS AFICIONES: Habrá lleno hasta la bandera

Las aficiones deberían jugar un papel importante. Para el UCAM será el partido más rentable, dado que es de largo el que más papel puede vender y el que más taquilla puede recaudar. De hecho, se colgará el cartel de ‘no hay billetes’, porque apenas quedan entradas. Su afición es una mezcolanza de viejos aficionados que han desertado ante la incomodidad de acudir al senderismo encubierto que es Nueva Condomina y acude a la de siempre, donde siempre ha visto fútbol, junto a pensionistas y militares sin graduación y una pequeña cantidad de jóvenes que han estudiado o estudian en la UCAM. Enfrente una afición, la del Real Murcia, muy nutrida de juventud, que es la que permite que viva la llama de la ilusión en una masa que disminuyó mucho por la cantidad de desilusiones que ha acontecido en lo que va de siglo. Los murcianistas están encantados de acudir a las ocasiones señeras en donde su equipo del alma no encuentre el vacío. Será este partido - dado que Cartagena haya sido ya cita obligada- sin duda el mejor momento para granas y universitarios acudan en masa -incluido algún cazador de celebraciones-, y se vean las caras, y den el color a las gradas de un partido que se antoja lleno de alicientes.

3. LA HISTORIA: Un aspecto que cuenta poco

Por historia no debería haber color. De hecho el Real Murcia (1908), con 109 años, ofrece un palmarés excelso comparado con el ofrecido por el UCAM (1999-2000 y su fusión con Costa Cálida 2011-2012) en su corta vida. Jalonada de participaciones en Primera y en Segunda División, con 53 campañas -rey absoluto-, el Real Murcia tocó fondo cuando Tebas lo mandó, por no cumplir el plan con Hacienda, a Segunda B, donde dormita desde el verano de 2014.

Pero precisamente porque se trata de un derbi, la historia cuenta muy poco y en este aspecto los anales no caen por su peso. El UCAM, en la única liga que pelearon (temporada 15-16), adelantó a los granas en el último tercio del campeonato. Le ganó el partido en Nueva Condomina y lo relegó a un segundo puesto. El UCAM acabaría ascendiendo.

En el único duelo entre ambos en La Condomina (noviembre de 2015), la victoria fue grana (1-2).

REFUERZOS: Dos bolsillos diferentes

Ambos han fichado con distinta carga de profundidad. La bonanza económica de un UCAM que se ajustó el bolsillo en verano le ha permitido cubrir la ‘huida’ inesperadas de Jony Ñíguez, la pérdida obligada de Quiles y la salida Arturo por su falta de gol. Las dos bajas en la delantera le han obligado a encontrar un ‘9’ ideal.

Los nombres, al menos sobre el papel, de Javi Jiménez, Cristian Bustos, Julen Colinas, Manu Onwu, Gerard Oliva, Fran Grima y, sobre todo, Abel Gómez parecen muy prometedores. Es extremadamente curioso, que varios de ellos, por un lado, tienen pasado grana o bien proceden de un Lorca FC, cuya desbandada parece lo más cercano el huir de una segura muerte deportiva.

En el Murcia ha sido todo diferente. La carestía ni siquiera le obliga a cambiar cromos -Fede Vega por Molo y Carlos Martínez- sino a liberar contratos desmesurados ejercidos este verano, cuyo rendimiento ha sido casi indigente, como son los casos de Álex Ortíz, Molinero, Llorente y Salva Chamorro. El Murcia perdió el ‘9’ ideal cuando Victor Curto se lesionó y desde entonces lo piensa cubrir con lo que ya tenía, Elady y Pedro Martín, a la espera de que éste último confirme lo que en los primeros partidos parecía augurar, y con el recién llegado Chrisantus. Salmerón ha comprado lo que en realidad le gusta: centrales -Molo y Charlie Dean- y un atacante, Carlos Martínez, que vale tanto para un roto como para un descosido. Además se está trabajando para la inscripción del centrocampista Miguel Pallardó y del delantero mexicano Othoniel Arce, aunque no estarán en La Condomina.

El derbi levanta el telón. Y los entrenadores no dudarán enseguida mostrar sus nuevas estrellas, aunque ya la jornada pasada, algunos de los mismos (Molo, Carlos Martínez, Javi Jiménez, Cristian Bustos, Colinas…) cantaron en falsete.

5. ESTADO ANÍMICO: Sensaciones similares

Tanto UCAM Murcia como Real Murcia afrontan el partido con sensaciones anímicas similares, aunque distintas. Los azules, aparte de la triada de partidos perdidos, buscarán ganar el encuentro por dos razones: primero por ser quien viene y segundo porque la plantilla, a pesar de no jugar bien, mantiene un espíritu combativo, esencial cuando se enfrenta a los granas. A diferencia del Murcia que, a estas alturas de campeonato, comienza a pensar más en los problemas económicos, preocupando además los boletos de despedida, cuando ya no existe tiempo real para fichar por otro equipo.

De todas formas una victoria rompería el maleficio de no ganar en Murcia desde mitad de octubre. Y la Condomina sigue siendo Murcia. La ansiedad que le puede caer a uno de los dos será evidente si se pierde la cercanía a los puestos de liguilla.

6. LOS PORTEROS: Biel, con más ritmo que Javi

Muy importante el papel de los cancerberos de uno y otro equipo. Ambos, como los entrenadores, formarán parte de la historia futbolística de los dos equipos. El primero, Javi Jiménez (Logroño, 1987), jugó en el Real Murcia en las campañas 2011-2012 y 2012-2013, en las que peleó con Alberto Cifuentes por el portal grana. No quiso renovar por el Murcia y fichó por el Levante, que estaba en Primera, donde apenas jugó. Luego pasó por el Alcorcón, el Elche y el Huesca. En este último club sufrió una grave lesión que le ha impidió jugar prácticamente desde hace casi dos años. En este mercado ha fichado por el UCAM Murcia para sustituir al lesionado de gravedad Germán Parreño.

En la portería del Real Murcia estará el balear Biel Ribas, quien jugó en el UCAM una temporada y media (15-17). Llegó del Numancia para sustituir al lesionado Escalona.

Javi Jiménez y Biel Ribas son dos fenomenales guardavallas, por lo que ambos tendrán que decir mucho en cuanto al desenlace del partido, pero la temporada inactiva del logroñés puede influir dado que la portería es una zona donde se nota el ritmo de entrenamiento y sobre todo de partidos.

7. LOS ENTRENADORES: Dos viejos conocidos

Curiosamente José Miguel Campos y José María Salmerón están en la historia de UCAM y Real Murcia, respectivamente. En el club de Mendoza, con el almeriense en el banquillo -temporada 16-17-, los universitarios ganan el campeonato del Grupo IV y ascienden a Segunda eliminando al Castilla. Además, levanta el trofeo de Campeones batiendo a su rival: el Reus. En apenas medio año en el fútbol profesional, Salmerón fue destituido. Llegó a la jornada 18, pero la mala posición del equipo -21º- obligó a los responsables del UCAM a despedirle para dejar la plantilla en manos de Francisco, que descendió pese a tener en la mano la salvación.

José Miguel Campos, en cambio, es de los entrenadores murcianos que más equipos de la Región ha dirigido -At. Abarán, Bala Azul, Murcia Imperial, Real Murcia, FC Cartagena, La Hoya y ahora el UCAM-. A los granas los entrenó 26 partidos, sustituyendo a Clemente en la temporada 08-09 y logrando la salvación en Segunda. Al año siguiente, después de confeccionar la plantilla a su gusto, dirige las diez primeras jornadas, pero la falta de triunfos y el mal juego llevan al club a destituirle por José González, quien precisamente debuta el día del 1-4 del Cartagena. Esa fue el año horrible que acaba con el descenso en Gerona.

A ambos técnicos, en horas bajas, no les llega bien el derbi, porque una derrota de cualquiera de los dos, puede dejarlos tocados. Ambos necesitan una victoria sin demora y, según vaya transcurriendo el partido, a uno y a otro puede interesarle el resultado de empate, algo que podrá encabritar a más de un aficionado. Pero los tres puntos serán golosos.