Al Real Murcia le toca otra vez correr en el último día del mercado de fichajes, ya que a pesar de que la entidad anunció ayer la contratación del tercer refuerzo del mercado invernal, el central Charlie Dean, ayer a última hora de la noche no se habían alcanzado acuerdos con los jugadores a los que se le ha comunicado que deben buscarse otro destino sin apenas tiempo para mover sus hilos, lo que puede provocar que la situación se enquiste hoy con unos descartes que en la mayoría de los casos tienen firmadas dos campañas con la entidad grana, lo que supone un desembolso muy importante deshacerse de ellos en un momento complicado, más teniendo en cuenta al gran malestar que existe en el vestuario murcianista por el hecho de que mañana jueves se cumplirán tres meses completos en los que jugadores y empleados del club no han recibido ninguna de las nóminas de noviembre, diciembre y ahora se le suma el mes de enero.

A pesar de que el club no anunció ayer nada de manera oficial, cuatro jugadores están con un pie dentro y otro fuera de la entidad, entre otras cosas porque cuatro futbolistas de los que comenzaron la pretemporada con el equipo, el lateral Fede Vega, el central Álex Ortiz, el centrocampista Fernando Llorente y el delantero Salva Chamorro estuvieron ayer por la tarde en las oficinas de Nueva Condomina negociando la posible rescisión de sus contratos, aunque ni el entorno de los jugadores ni el propio club se atreven ahora mismo a poner la mano en el fuego sobre qué va a pasar hasta las doce de esta noche, momento en el que ya no se pueden inscribir futbolistas ni conceder bajas, salvo excepciones concretas.

Teniendo en cuenta que, como mínimo, la idea de la dirección deportiva que dirige el vitoriano Pedro Gómez Carmona es la de realizar cuatro salidas y sus cuatro relevos correspondientes, se trata de correr muchos riesgos el hecho de haberlo dejado todo para el último día, como hacen los malos estudiantes.

Según pudo saber ayer esta redacción, a pesar de que ayer no se concedió ninguna baja en Nueva Condomina, hay dos clubes que se han movido para preguntar por Salva Chamorro y por Fede Vega. El delantero oriolano maneja una propuesta del Mirandés y el lateral argentino, al parecer, ha recibido una llamada por parte del Lorca, de Segunda, para interesarse por su situación en concreto, aunque la media vuelta que ha cuajado el exjugador del Alcorcón como grana en Segunda B hace que resulte complicado pensar en que Vega sea una de las opciones que están barajando seriamente en un Lorca que está en una situación igual de grave que el Murcia, ya que a la mala racha deportiva se le une que el club está en pleno proceso de venta, lo que ha llevado a muchos jugadores de la Ciudad del Sol a solicitar su salida de la entidad. De hecho el defensa Molo y el extremo Carlos Martínez han llegado al Murcia desde el club lorquino que preside Xu Genbao.

El central Álex Ortiz y el medio Fernando Llorente también estuvieron ayer noche reunidos con la secretaría técnica murcianista en el coliseo grana y sus contratos tampoco van a facilitar ni mucho menos las cosas. Las fichas tan elevadas que ofreció Deseado Flores en verano para conseguir algunos de los futbolistas más cotizados de Segunda B se han convertido en estos momentos en un lastre para una directiva que está planeando una revolución en la plantilla sin haber sido capaces de solucionar los tres meses pendientes y que, según se acordó con los capitanes, eran unas cantidades que iban a llegar a las cuentas corrientes de los jugadores esta misma semana, algo que no ha sucedido por ahora.

Por muchas negociaciones que tengan abiertas los dirigentes, en unas doce horas tienen que tratar de rescindir algunos contratos con cantidades astronómicas para la categoría, al mismo tiempo que ya deberían tener atados en la recámara a los efectivos que ocuparían los huecos dejados, en principio, por estos cuatro jugadores. El último día de mercado siempre hay sorpresas, pero también se asumen riesgos.