'Antes de entrar, dejen salir'. La frase, una de las indicaciones de cortesía que hemos aprendido gracias al Metro de Madrid, debería ser instalada cuanto antes en la puerta de acceso a las oficinas del Real Murcia en Nueva Condomina. Y es que, tras la llegada de los primeros fichajes, ahora toca hacer hueco en una plantilla que solo tiene dos plazas disponibles, una sénior liberada por el lesionado Víctor Curto y otra sub-23 desocupada por la marcha del cedido Nadjib.

A la espera de saber si llegarán más incorporaciones, el Real Murcia ya ha oficializado las contrataciones de Molo y Carlos Martínez. Uno de ellos, si no fuera porque los granas tienen los derechos bloqueados por el impago de las denuncias que tiene ante la Comisión Mixta de la Federación Española, podría haber jugado el pasado domingo. Esa era la idea de Salmerón, que expresó su deseo de contar inmediatamente con Molo. Si el club hubiese pagado las cantidades exigidas, el central hubiese ocupado la ficha libre dejada por el lesionado Víctor Curto. Más pasos se tienen que dar para hacer hueco a Carlos Martínez, y es que el Real Murcia, al margen de resolver las denuncias, debe liberar otra plaza sénior.

A la espera de que los responsables granas comuniquen la baja del jugador que no entra en los planes de José María Salmerón para esta segunda vuelta, los candidatos a salir son varios. Los nombres que más suenan son los de Fernando Llorente y Abel Molinero. Ni el segoviano ni el madrileño han cumplido con las expectativas, hasta el punto de desaparecer prácticamente de las alineaciones.

El ex del FC Cartagena, que el pasado verano vivió una presentación de lo más especial al no anunciarse su nombre hasta el mismo momento de la rueda de prensa y que fue una de las grandes apuestas de Deseado Flores, solo ha disputado 657 minutos. De los trece partidos que ha jugado, ha sido titular en ocho. Con la llegada de Salmerón ha pasado a un segundo plano. En los últimos seis partidos solo ha jugado 93 minutos, entrando en el once en una ocasión, aunque fue sustituido en el descanso. El domingo en El Ejido, pese a las bajas, empezó en el banquillo y saltó al terreno de juego en el último cuarto de hora.

Si la continuidad de Llorente, cuya duración de contrato no quiso ser anunciada en julio por Flores, es complicada, la de Abel Molinero, mirando sus números, es prácticamente imposible. El extremo madrileño, lleva dos partidos sin disputar ni un minuto. En total ha jugado 449' y no es titular desde el encuentro frente al Jumilla (5 de noviembre). Desde aquel día solo ha disputado 94 minutos. Ante el Linense -17 de diciembre- consiguió su único gol, dando la victoria a los granas.

«Es un jugador de uno contra uno, con rapidez y que nos puede aportar mucho», decía Deseado Flores en la presentación de Molinero, que fue el primer fichaje veraniego. Virtudes que después de seis meses de competición no han aparecido sobre el césped.

Parece que los nuevos gestores del Real Murcia no están dispuestos a hacer una gran revolución en este mercado invernal, aunque posiblemente sí llegue algún refuerzo más. Cada jugador sénior que llegue implicará la salida de un compañero. Los movimientos hacen indicar que los granas quieren otra incorporación en defensa, lo que podría implicar la salida de un Álex Ortiz que, pese a disponer de muchos minutos, ha dejado malas sensaciones. Ahora mismo está lesionado, pero las dos expulsiones seguidas ante el Betis y el Linense le han dejado señalado.

El lateral Fede Vega es otro de los que no está viviendo sus mejores meses como futbolista. Fue titular en El Ejido por la baja de Forniés, pero el argentino llevaba tres encuentros sin disputar ni un minuto. Con Salmerón como entrenador, el ex del Alcorcón solo ha jugado 274 minutos.