El mexicano Mauricio García de la Vega aterrizó ayer en la Nueva Condomina y ya ha comenzado a tomar las primeras notas del club que ha pasado a controlar tras conseguir la cesión de las acciones por parte de un Raúl Moro que ha decidido marcharse de la entidad grana un año después, agotado por su falta de liquidez. La propia entidad grana anunció la estancia ayer del agente de futbolistas a través de un comunicado en la página web del club que iba acompañado de varias fotos del nuevo gestor grana sobre el césped de la Nueva Condomina.

«Mauricio García De La Vega, ya lleva trabajando en el club desde el día 1 de enero de 2018. Ya en la jornada de ayer estuvo trabajando en las oficinas del club. Hoy ha aprovechado la mañana para saludar a los técnicos de la Factoría Grana en el entrenamiento celebrando en el césped de Nueva Condomina con los niños del Clínic de Navidad», explicaba la escueta nota que la centenaria entidad publicó a través de sus canales oficiales.

Pero además de la expectación generada por la llegada del hombre que presumiblemente llega con la firme idea de devolver al Murcia a Segunda División, los aficionados granas tienen muchas más dudas sobre la operación que ha terminado con el adiós de Raúl Moro y la llegada de un prestigioso representante de jugadores en Sudamérica, por lo que según algunas fuentes es muy probable que a comienzos de la próxima semana, incluso el lunes, se lleve a cabo la primera rueda de prensa de De La Vega en la que tendrá que explicar cuál es el plan con el que llega para tomar las riendas de una entidad que vive una de sus peores épocas asfixiado por las numerosas deudas, sobre todo la contraída con la Seguridad Social.

La primera aparición pública del nuevo gestor grana, a pesar de estar en la capital desde el día 1, llegó también con motivo de la clausura del clínic de Navidad de las bases del Real Murcia, con lo que los empleados del club que todavía no habían tenido la oportunidad de presentarse a su nuevo jefe tuvieron ocasión de hacerlo. Un nuevo jefe que ya estuvo viendo el encuentro de su nuevo equipo ante el colista Lorca Deportiva desde una zona cercana al palco de autoridades, aunque ese día no levantó ningún tipo de sospechas. Ahora, junto a su equipo de trabajo, será la persona encargada de coordinar los refuerzos y de que el club recobre la normalidad tras dos meses sin cobrar ni empleados ni jugadores.