Si hay un jugador ´especial´ en la plantilla del UCAM CB Murcia ese es Marko Lukovic. El ala-pívot serbio está viviendo su primera experiencia profesional lejos de casa y el entrenador Ibon Navarro, desde su llegada, está realizando un ejercico de paciencia para que encuentre su hábitat lo más pronto posible y sacar el talento que provocó que el técnico vitoriano apostase fuerte por su fichaje. En el último triunfo del UCAM, ante el Tecnyconta Zaragoza, la actuación de Lukovic sorprendió a todo el mundo, incluso a un Ibon Navarro que así lo reflejó cuando acabó el partido.

«A veces le mataría, pero estoy muy contento con su actuación porque nos ha ayudado mucho en el rebote, algo que hasta ahora no estaba haciendo, y atrás ha estado bastante correcto», explicó el entrenador al término del choque.

Y es que, el interior supo tomar buenas decisiones en ataque cada vez que decidía atacar la canasta en el poste bajo y a pesar de que no tuvo su día desde el triple, su mejor baza. Pero, sobre todo, echó una mano en defensa mientras que Soko recuperaba el aliento cuando se veía obligado a marcharse al banquillo; y eso también sumó para que un jugador como Dragovic acabara el encuentro sin poder anotar. Esa será la tónica que tendrá que mantener el domingo, en Nochevieja, a las 12.30 horas en el Palacio frente al Baskonia, donde los universitarios buscarán una nueva victoria en la competición doméstica. Lukovic igualó su tope en rebotes en la Liga ACB con 7 capturas, las mismas que recogió en el WiZink Center ante el Real Madrid, y alcanzó por primera vez en la Liga Endesa los dos dígitos en la anotación con 10 puntos. El serbio, al contrario que otras ocasiones, no se bloqueó ni se obsesionó con el triple a pesar de no convertir ninguno de los cuatro lanzamientos que intentó y fue el jugador que más balones recogió atrás con cinco rebotes defensivos, justo por detrás de su compañero Ovie Soko (con siete).

La grave lesión de Antelo en el primer amistoso de pretemporada, al romperse el tendón de Aquiles de su pierna derecha, provocó un giro en los planes establecidos para Soko y el propio Lukovic. El alero británico ha tenido que cambiar el ´chip´ para regresar a la posición de ´cuatro´, donde el último mes y medio está demostrando un poderío físico que ha elevado el juego del UCAM en las dos canastas. Sin embargo, el serbio, de 25 años, se ha visto con un protagonismo que hasta la fecha no sabía cómo lidiar.

Ahora, cinco meses más tarde, Lukovic está mucho más adaptado al equipo, a la liga y a la conviviencia con el resto de sus compañeros. Además, en los últimos días ha contado con la visita de su familia a la ciudad, como ha mostrado en sus redes sociales, lo que también ha sido un espaldarazo de confianza para el propio jugador. Ante el Zaragoza se contagió del espíritu competitivo del resto de la plantilla y éste es el camino que el cuerpo técnico universitario quiere que tome el jugador para dar un paso un paso más en la rotación.

El interior serbio está convirtiendose en un fijo en los descartes que tiene que hacer Ibon Navarro para la Champions, por el tema de los cupos de formación, aunque si es capaz de mantener una línea más regular en cuanto a intensidad que encaje con el resto de la plantilla seguro que tendrá la posibilidad de ayudar más asiduamente a que el UCAM alcance la siguiente ronda.