El entrenador del FC Cartagena Alberto Monteagudo tuvo que mediar en la disputa que tuvieron el pasado sábado dos jugadores de su equipo y dar por concluida la sesión de entrenamiento antes de lo previsto para que la situación no fuera a más.

Según informaba el periodista Pepe González en su programa deportivo radiofónico, Paralelo Deportivo de OM Radio, Moisés y Chavero eran los protagonistas de la acción que generó que saltaran chispas en la última sesión de trabajo previa al encuentro ante el RB Linense.

Cuando habían pasado alrededor de cuarenta minutos del trabajo, el central efectuó una dura entrada a su compañero y éste se la recriminó y además le dio un guantazo en la cara, según explicaba González en su programa. Fue entonces cuando Sergio Jiménez, uno de los capitanes del equipo, le recriminó a Chavero su actitud.

El defensa central ha permanecido durante cuatro semanas de baja debido a la sanción que ha tenido que cumplir por la expulsión que sufrió en la jornada decimoquinta ante el Badajoz. Por su parte, el centrocampista Chavero fue titular en el encuentro del pasado domingo ante el RB Linense, por lo que Monteagudo ha preferido no darle más importancia a lo sucedido en el campo de fútbol del López Belmonte.

«A veces saltan chispas»

«A veces saltan chispas»El portero Pau Torres fue preguntado en la rueda de prensa que ofrecía ayer miércoles por esta circunstancia y el cancerbero le restó transcendencia. «No es un problema. Todos queremos jugar y a veces pueden saltar chispas, pero todo va bien entre los integrantes de la plantilla y además buscamos el mismo objetivo».