Nos inunda la Navidad, esa época del año en la que todo es de luz y color, de futuras promesas y enormes deseos. Es el deporte rey el que más palabras de ilusión y fantasía conjuga durante estas fechas, con el afán de que la llegada de un nuevo año sea más productivo y exitoso que el pasado. Nuestros protagonistas, jóvenes aventurados y ligados fielmente al placer que otorga patear una pelota, son los mayores exponentes de la complejidad que abarca, y abarcará siempre, triunfar en el mundo del fútbol: el fútbol base, de sueños, entiende como el que más.
UCAM y Real Murcia medirán sus fuerzas dentro de un par de días en Santiago el Mayor. Pero este duelo capitalino no implica la repercusión que sí rodea a sus equipos senior, ya que hablamos de los equipos juveniles que forman parte del Grupo VII de División de Honor. Con motivo de este choque, este diario ha querido reunir a sus entrenadores y los capitanes de ambas plantillas: José Larrosa y Keko García, como técnico y líder del vestuario universitario; y el dúo Javier Motos-Víctor Meseguer, como máximos representantes murcianistas. Nuestros protagonistas encarnan pasado y el más brillante de los futuros. Dejaron claro en poco más de media hora de coloquio que en el fútbol no existen favoritos, y menos aún en un choque de este calibre. Pero lo que podría convertirse en un sinfín de preguntas relacionadas con un partido que, como bien ellos comentan, 'son solo tres puntos más', comenzó con una breve y simple introducción de los técnicos sobre lo que puede deparar el encuentro: la conclusión de la primera vuelta de la temporada, tal y como comentaron, permite que el duelo enfrente al UCAM más rocoso y consistente del curso, y al Real Murcia de los excelsos números.
Pero, tras esto, tocó radiografiar al fútbol base de nuestra Región con sus mejores exponentes. Todos los equipos luchan y sueñan con un único fin: ganar. Pero tanto Larrosa como Motos destacan siempre, por encima de todo, la formación del futbolista. «Espérabamos estar en una situación más tranquila, pero lo pasado ya no sirve de nada. En esta situación el jugador crece», afirma Larrosa, quién intenta redirigir al UCAM hacia la permanencia, además de ser el director de la cantera del club universitario. A Javier Motos, por su parte, nadie podrá decirle que ha vendido promesas difíciles de cumplir: «El objetivo sigue siendo salvarnos de forma tranquila. Una vez conseguido, lo que venga, vendrá». Paciencia y seguridad, ante todo. Y ese es el aspecto en el que creen, inciden, todas las canteras de nuestra Región. Además de UCAM y Real Murcia, Larrosa y Motos insisten en que tanto sus clubes como Ranero, Torre Pacheco o Cartagena perseveran en la formación y en la motivación que debe inculcarse a las promesas de nuestro fútbol. «Debemos luchar con nuestras armas, el trabajo, el arropo, cariño y dedicación que tienen aquí no lo encuentran fuera de casa, y después, que ellos decidan», confiesa Motos.
José Larrosa y Javier Motos comparten cargo, pero llegaron de forma distinta. El primero disfrutó de una amplia trayectoria como futbolista, y el segundo dirige equipos base desde los dieciocho años. Dos ejemplos de que la experiencia y el esfuerzo se aúnan aquí y ahora para cuidar de muchos talentos murcianos en base a una única premisa: el trabajo constante.
Capitanes, amor por el escudo
Capitanes, amor por el escudoCuando un jugador de la cantera desembarca en el primer equipo, se habla de sus sentimientos hacia el escudo y sus colores. Los jugadores y sus clubes se encuentran en el paso previo al 'sí quiero', una fase en la que el futbolista se lo curra y el equipo le corresponde.
«Víctor es el jugador que refleja la filosofía de juego del equipo, un líder, la instrucción precisa en el momento preciso», declara Motos de su capitán, Víctor Meseguer. «Es un ejemplo para todos, entrena como el que más y siempre aporta, y por eso es respetado en el vestuario», afirma Larrosa sobre Keko García. A fin de cuentas, ambos desembocaron en dos conclusiones especialmente clarificantes. División de Honor te permite «sentirte futbolista, aunque realmente no lo seas», afirma Keko, o también una visión que va más allá del juego: «Juegas contra Villareal o Atlético de Madrid, el club te mima, y es una flipada», corrobora Víctor. Ambos ponen su compromiso al servicio de sus clubes. «No hay nada peor que perderse un partido», según comenta Meseguer, a lo que Keko añade «siempre hay que levantarse y luchar hasta el final».
Como conclusión, desconocemos si Larrosa descubrirá a un futuro crack murciano; si Javi Motos continuará creciendo a ese ritmo frenético para dirigir a un equipo al máximo nivel; o si Keko y Víctor se reencontarán sobre el césped, en unos años, capiteando a sus equipos senior. Mientras puedan disfrutar del romanticismo del fútbol base, ellos recalcan que trabajarán duro con una doble meta: dejarnos a todos perplejos para así poder decir que sus sueños se han hecho realidad. Por ahora, caminan juntos para descubrir los distintos rumbos hacia el merecido éxito.
