El UCAM CB Murcia ha amanecido sudoroso. Aturdido. Angustiado. El 'thriller' que vivió ayer en el WiZink Center contó con el final más retorcido de las últimas jornadas en la liga ACB. Porque si ya es difícil poner contra las cuerdas al líder en su casa una vez, los universitarios lo llegaron a hacer hasta en dos ocasiones. Sin embargo, dejaron con vida al Real Madrid y el asesino, como suele suceder en las sagas policíacas, regresó de nuevo a la escena del crimen para romper un sueño que el UCAM rozó con la punta de los dedos (87-85).

Y es que fueron dos triples sobre la bocina de Trey Thompkins, uno para forzar la prórroga y otro para darle la victoria al conjunto blanco en el tiempo de prolongación, los que impidieron que el equipo murciano consiguiera la primera victoria de su historia en la casa del Madrid. Los jugadores de Ibon Navarro, entrenador del equipo universitario, saltaron a la pista sin complejos y dispuestos pelear por el triunfo hasta el final, como llevan haciendo desde que arrancó la competición en octubre independientemente del rival que se encuentre enfrente.

El UCAM llevó al límite a su poderoso Goliat. Le arrastró a forzar tiros que no entraban, pases que se perdían y rebotes que no capturaban. Eso permitió llegar a los murcianos a diez segundos del final del tiempo reglamentario tres puntos por encima de su rival (76-79) y con dos tiros libres en su bolsillo. Pero ahí fue cuando el sueño de poder asaltar el Palau Blaugrana -con la victoria ante el Barcelona Lassa hace unas semanas- y el WiZink Center en una misma temporada, comenzó a transformarse en una pesadilla.

Los dos lanzamientos de Sadiel Rojas, con un 76% en tiros libres en las diez primeras jornadas en la Liga Endesa este curso, fueron escupidos por el aro y el UCAM decidió confiar en su defensa, la que le había llevado a ese momento, en lugar de hacer falta y mandar al Madrid al tiro libre para contar con la última posesión. Soko ahogó a Doncic, pero el esloveno cedió el balón a Thompkins y fue el norteamericano quien se sacó un triple muy forzado para mandar el partido a la prórroga. El mazazo fue durísimo para el equipo murciano. Pero sólo le bastaron unos segundos para levantarse de nuevo. La reacción estuvo personificada en el propio Rojas, quien después de no poder dar la puntilla desde el tiro libre, no le tembló el pulso para anotar dos triples, uno de ellos amagando a Doncic, que adelantaron hasta en dos ocasiones a los de Ibon Navarro. Hasta que de nuevo apareció Thompinks, fintó a Soko, después al propio Rojas y anotó el triple definitivo que dio el triunfo al conjunto blanco (87-85).

El Madrid no llegó por delante en el marcador a ninguno de los cuatro cuartos, salvo al término de la prórroga, gracias al plan defensivo de Ibon Navarro. El técnico vitoriano volvió a sacar partido de su ataque sin poder contar con una cantidad considerable de puntos de sus interiores. Salvo los de Ovie Soko, quien acumula unas semanas muy regulares sacando partido a su físico en la zona. Además, el plan de 'cuidar' a Kloof el pasado martes en la Champions League también salió a la perfección, puesto que, aparte de estar más fresco que Luka Doncic, fue otro de los baluartes en la anotación.

Y eso que el Madrid dio la impresión de arrancar con una marcha más emprendida por Facu Campazzo. El base argentino se midió por primera vez al UCAM desde su adiós en verano, pero la suerte no estuvo de su lado y se torció el tobillo a los cuatro minutos de juego, lo que le impidió regresar a la pista (12-12). Hannah supo encontrar los espacios y empezó a maniatar a un Madrid que tampoco tenía acierto ante la intensidad defensiva visitante. Con las rotaciones, se mantuvo el guión y Kloof cerró el primer cuarto con un mate tras un robo a Doncic, y más tarde puso la guinda con un triple sobre la bocina (16-22).

Los dos bases del UCAM sumaron durante varios minutos de la primera mitad más puntos que todo el Madrid. Los murcianos, a pesar de los centímetros de Tavares, pelearon cada rebote llegando a destacar en el ofensivo y cuando las faltas empezaban a amenzar, lograron la máxima ventaja que obligó pedir tiempo muerto a a Pablo Laso (23-33). Sin embargo, Navarro también paró el partido tras la pronta reacción local. El UCAM respondió con un parcial de 7-0, con la aparición de Benite, junto a Kloof y Hannah juntos en la pista. Aunque Carroll maquilló el marcador para el Madrid antes del descanso (37-41).

Se tuvieron que consumir tres minutos para ver la primera canasta de la segunda parte. El equipo universitario, pese a que tampoco podía obtener beneficio, supo llevar el partido a su terreno con un ritmo pausado que siguió por inercia prácticamente el Madrid tras su partido del viernes ante el Olympiacos en la Euroliga. Taylor y Thompkins acercaron a los blancos (44-43), pero el UCAM reaccionó de nuevo con un Marko Lukovic que sacó una buena canasta por dentro antes de llegar al último cuarto (49-54).

En los últimos diez minutos apareció Radoncic para meter en el partido al Madrid. El duelo contó con un ritmo más constante en la anotación (68-65) y los jugadores del cuadro murciano trataron de buscar a Doncic, con cuatro faltas, para atacar por su lado. La 'perla' del Madrid se topó con un tapón de Tumba y, Kloof, desde el tiro libre, empató el encuentro (69-69). Oleson, desde el triple, puso en buena posición al UCAM para el carrusel de tiros libres. Y ahí fue cuando llegó Thompkins, la prórroga y de nuevo Thompkins (87-85).