¿Cuándo empezó a hacer deporte?

Hombre, deporte siempre he hecho un poco, pero era muy poco constante y enseguida lo dejaba. Pero con 36 años empecé a correr por mantenerme en forma, no por que me gustara. Me daba envidia la gente porque yo ni podía dar media vuelta al campo de fútbol.

¿Y cuándo dio el paso de apuntarse a las carreras?

El día que ya di una vuelta entera al campo de fútbol comprobé que podía. Al principio me daba vergüenza apuntarme a las carreras porque pensaba que iba a llegar la última y se iban a reír de mí, pero tras hacer la primera, que fue Nonduermas, no quedé la última y me encantó el ambiente. Desde ese día no he parado, buscando todos los domingos una carrera con mi pareja y mi hermana.

¿Pero solo le gusta el asfalto?

No, también he hecho algún trail duro como el Gavilán. Antes había corrido la Ruta de las Fortalezas, pero como el Gavilán, que son solo 11 kilómetros, no hay otro.

¿Y cómo le fue en las Fortalezas?

Cuando me apunté yo no estaba preparada y no había corrido en la vida más de 10 kilómetros, pero me lo propuso el presidente de mi club y me atreví. Todo el mundo me decía que estaba loca, pero quería intentarlo y al final la acabé, aunque fue en ocho horas.

Es madre de tres hijos, ama de casa y trabaja. ¿De dónde saca el tiempo para entrenar?

Levantándome a las seis de la mañana, pero vale la pena el sacrificio. Mis hijos tienen 17, 14 y 9 años y aparte de trabajar, soy ama de casa. La única forma que tengo de sacar tiempo es madrugando. Antes, cuando tenía turno de mañana, no salía durante esa semana, pero desde hace un año me he dado cuenta que lo puedo hacer, y que cuando lo hago, empiezo el día con más energía, aunque es cierto que a las diez de la noche estoy muerta.

¿Cuando empezó a hacer las carreras del circuito ´Corre por Murcia´ fue con el afán de ganar?

No, lo he hecho porque mi equipo se apuntaba a todas, Ginés Soto (organizador) es amigo mío y el año pasado ya hice varias carreras de las fiestas de los pueblos que me gustaron, aunque otras no. No me imaginaba que iba a quedar primera ni nada de eso.

¿Pero alguna ha tenido la necesidad de ganar?

No soy una persona competitiva. He aprendido a disfrutar de las carreras porque antes quería ir más rápida y ganar, y eso provocaba que sufriera. Solo pienso en acabar y me siento muy bien cuando lo consigo, porque además, el ambiente después es divino. Pero sobre todo lo que me gusta es estar con mi equipo, porque tengo un pedazo de equipo. Desde luego, una de las mejores decisiones que tomé fue apuntarme a los Rajaos Runners.

Pero eso de Rajaos suena a gente que no se atreve.

Exactamente, pero nosotros sí nos atrevemos a todo, pero bastante. Por ejemplo, ahora vamos a hacer un grupo el Trail de Doñana, de 72 kilómetros.

¿Le ha entrado el gusanillo de las distancias largas?

Sí porque me gustó mucho la Ruta las Fortalezas. Lo único malo que tienen esas tiradas largas es que necesitas un entrenamiento fuerte y cuesta hacerlo.

¿Pero es sano eso?

No lo sé, lo único que te puedo decir es que me encuentro mejor que nunca. Mi composición corporal ha cambiado y me encuentro perfecta.

¿Estaba antes gruesa?

Soy propensa a engordar, pero nunca he estado obesa. Pero evidentemente han cambiado mis piernas, mis brazos y mi cadera. Dentro de que tengo un peso como el de siempre, mi cuerpo sí ha cambiado.

¿Quizás no hay más mujeres que hagan deporte por el miedo a muscularse, a dejar de ser femeninas?

Corriendo no tienes por qué perder la fisonomía femenina. Lo que en realidad te da los músculos es el gimnasio, que también hago, aunque poco, solo para fortalecer el tren superior, que es necesario para correr.

¿Sus amigas qué opinan de lo que hace?

Muchas me dicen que sienten envidia de mi fuerza de voluntad, que ellas no pueden correr porque se mueren. Pero si no lo intentas y empiezas, no lo haces. No es fácil hacer 10 kilómetros cuando no has corrido nunca, pero poco a poco lo consigues. A mí me decía todo el mundo que dónde iba a una carrera, que haría el ridículo,

¿Hay más mujeres que hoy en día se lanzan?

Por supuesto, pero muchísimas más que antes. Y tienen mucho mérito. Mi hermana tiene 52 años, se viene conmigo a todas las carreras y es de admirar.

¿Y por qué a ciertas edades nos da a todos por hacer cosas que siendo más jóvenes no hemos hecho?

Quizás porque te quieres demostrar que puedes o por cuidar tu cuerpo. No es cuestión solo de estar bien físicamente, sino de estar a gusto por dentro. Ahora cuido más mi alimentación porque veo que no puedo dejarme. Hay que sacrificar algunas cosas, aunque tampoco muchas.

¿Y sus hijos, hacen deporte?

No. El mediano estaba jugando al fútbol, pero se lo ha dejado, y al pequeño sí que lo apunto a alguna carrera, pero tuvo rotura de tibia y peroné y está aún con la rehabilitación. Pero mis tres hermanos mayores, conocidos como los ´Lacas´, han jugado al fútbol y han sido muy buenos. Uno de ellos le sacó algún dinero y recibió una oferta del Hércules, pero no aceptó para no perder su trabajo.

¿Nunca le dio por jugar al fútbol?

No, pero es que yo nunca he sido buena en nada. Jugué al baloncesto, balonmano y fútbol en el colegio, pero no destacaba, y ahora tampoco es que sea buena corriendo.

¿Cuánto le dedica diariamente a correr?

Una hora, es lo único que puedo, que ya es mucho para una mamá trabajadora. Además, yo estoy separada, y cuando me quedé sola con mis tres hijos, tenía que hacer maravillas, ya que eran más pequeños. Ahora que el mayor tiene ya 17 años se puede quedar con los otros.

Tres hombres en casa. ¿Los lleva rectos?

Qué va, lo que pasa es que son divinos aunque no ayudan mucho en la casa, pero gracias a Dios no me han dado grandes problemas.