El Real Murcia de Javi Motos no deja de crecer. El duelo regional de la jornada de División de Honor entre el equipo grana y un Torre Pacheco que va, poco a poco, a más, dejó un resultado favorable para la escuadra murcianista (2-0), que tras seis encuentros disputados, continúa invicta y ha conseguido encaramarse a la segunda plaza en la clasificación.

Murcianos y pachequeros no defraudaron en lo que terminó convirtiéndose en un choque atractivo, con alternativas y emoción. El Murcia contemporizó el balón en la primera mitad espoleado por Domi y Platas, intentando absorber la fantástica presión ejercida por el Torre Pacheco. Sin embargo, fue el balón parado el que permitió al Real Murcia inaugurar el marcador. En el 7', Víctor Meseguer aprovechó un magnífico envío de Domi para anticiparse a toda la zaga y marcar de cabeza. No obstante, el Torre Pacheco guerreó hasta la saciedad, viendo incluso como se le invalidaba un tanto a Alemán por fuera de juego. El meta grana, Picachu, se erigió como salvador al intervenir en un par de ocasiones de peligro, primero ante Josema y después a balón parado tras un gran chut de Alemán. Se quedó el Murcia con uno menos tras ser expulsado el central Santana. Pero los granas, gracias a sus hombres de refresco, mataron el partido aprovechando sus espacios al contragolpe con el 2-0, obra de Alonso.

Por otro lado, el UCAM Murcia cayó dolorosamente goleado en su visita al líder, el invicto Atlético Madrileño. Comenzó perdiendo el equipo de Cardozo, pero se rehízo con solvencia y consiguió igualar la contienda gracias a un tanto de Herrero poco antes del descanso. Los universitarios, tras el hemisferio, disfrutaron hasta la saciedad de ocasiones para voltear el marcador, pero el travesaño y el meta local Cristian tiraron por tierra el peligro del UCAM. El Atlético, con tres tantos en el segundo tiempo, reventó las aspiraciones de un equipo que no consiguió rascar algo positivo en una salida complicada.

Por último, el Ranero se vio claramente condicionado por el colegiado en su visita a un rival directo, el Hércules. Cayó derrotado (3-0) al encajar goles en momentos clave, justo antes del descanso y al final del partido. El conjunto verde, que planteó un buen juego por el que pudo marcar en varias ocasiones, reclamó un penalti por mano clamorosa y acabó con uno menos tras la expulsión del meta Oliva.