El Lorca Deportiva perdió con estrépito ante El Ejido (5-1). Un equipo que, al igual que los lorquinos, no había ganado todavía en la presente campaña. Es difícil de entender la actitud y rendimiento de algunos jugadores lorquinistas en la tarde de ayer y que provocó que el Lorca Deportiva sea el equipo más goleado del grupo IV de la Segunda División B con quince tantos en contra.

Los diez primeros minutos del equipo de Manolo Palomeque, entrenador del conjunto lorquino, serán difícil de olvidar para el propio técnico. Parecía como si su equipo saltase al campo con el gorrito de la feria lorquina en vez de con el cuchillo entre los dientes por la necesidad de los puntos. Los jugadores parecían una caricatura de equipo y toda la disciplina táctica que el cuadro blanquiazul había mostrado en choque anteriores, las buenas sensaciones que había dejado en otros partidos... pese a perder, se fue al traste por la fragilidad de sus hombres. Sobre todo en la parcela defensiva.

El entrenador cartagenero del Lorca Deportiva había mostrado durante la semana su satisfacción porque ya puede contar con más efectivos. Desde el club se quiso trasladar a los aficionados esta se mana que ahora sería cuando se vería el verdadero Lorca. Pero vaya varapalo. Palomeque devolvió la titularidad a Pedro Montero, Juan Arcas y Víctor Fenoll y, además, también regresó Sergio Rodríguez al lateral zurdo tras superar unas molestias musculares.

Algunos jugadores estaban todavía acomodándose la gomina cuando el Ejido, marcó el primero. El conjunto andaluz aprovechó un rechace en corto de Lulu y Carralero, dentro del área, agradece el regalo batiendo a Simón.

Tres minutos después llegó otro error garrafal impropio de estos futbolistas, que permitió a Echu marcar el segundo.

El ridículo del cuadro lorquinista no quedó ahí, ya que a los ocho minutos llegó el tercero. Un entro desde la derecha que, ante la falta de contundencia de los centrales lorquinistas, Velasco de cabeza, alojó el cuero en el fondo de las mallas. Ni los locales ni los visitantes podían creer lo que estaba pasando. El Ejido no sabía lo que era ganar y había marcado hasta ahora cinco goles en cinco partidos. Pero ayer, en nueve minutos, logró tres.

Palomeque puso a calentar a jugadores, pero solo fue una leve amenaza. Los cambios llegaron tras el descanso y antes de eso el conjunto almeriense siguió jugando a placer ante un Lorca que no reaccionaba. No metía ni miedo al portero Cristian.

A falta de nueve minutos para el descanso acortó distancias el el cuadro local y lo hizo uno de los dos nacidos en Lorca que estuvieron en el once inicial. Juan Arcas, autor del gol, y el otro es Luismi. Sergio Rodríguez botó una falta escorada y Juan Arcas de certero disparo batió a Cristian en el primer acercamiento lorquino al portal almeriense.

Los hombres de refresco que introdujo Palomeque, Mauricio Alonso y Cristian Brito, que debutó en la categoría de bronce, solo pudieron ver como el Ejido marcaba el cuarto en el primer minuto de la reanudación. Este último batió todos los récords. Debutó, vio dos amonestaciones en cinco minutos y se marchó expulsado. Impresionante. Carralero a pase de Velasco, tras un buen contragolpe, amplió la ventaja apenas iniciada la segunda mitad. El marcador lo amplió Javi Hernández con el quinto a quince minutos del final cuando el Lorca Deportiva ya se había dado por vencido desde hacía rato.

El conjunto lorquino recibirá en el Artés Carrasco la próxima jornada al Melilla y mucho tendrán que cambiar las cosas para que el Lorca Deportivo pueda rascar algo dentro de una semana ante el quinto clasificado del grupo IV de la Segunda B.