El Plásticos Romero Cartagena consiguió la primera victoria de la temporada al superar por 5-2 al Naturpellet Segovia en un partido en el que conjunto de Juan Carlos Guillamón sufrió altibajos en su juego, pero que acabó resolviendo gracias a su chispa de calidad. Los visitantes vendieron cara su derrota, ya que en ningún momento se dieron por vencidos, y de haber tenido más acierto en ataque y más seguridad defensiva, le habrían complicado mucho más la vida a los cartageneristas.

El conjunto local tuvo que soportar la presión del Segovia, que trató de impedir la salida de los locales en los primeros instantes, pero pasados dos minutos, encontraron la forma más adecuada para salir de ese atolladero y comenzar a estirar sus líneas. A los tres minutos Fernández dispuso de la primera oportunidad con un tiro que obligó a emplearse a fondo al cancerbero Cidao. Los blanquinaranjas se iban a apoderando del control, donde Juanpi y otra vez Fernández estuvieron cerca de inaugurar el marcador. Por su parte, el Segovia trataba de defender y buscar sus oportunidades en las contras. A los 5 minutos, Guillamón cambió el bloque, saltando a pista Attos, José Carlos, Rahali y Drahovsky. Con esta alternativa la intensidad en ataque se frenó, ajustando la defensa para anular las contras del Segovia. Eran instantes en los que el juego se equilibró y la escuadra visitante comenzó a contar con posesiones largas. El partido se equilibró, aunque el Plásticos Romero se sentía menos enchufado. El choque se estaba definiendo por altibajos en ambas escuadras, aunque los locales disfrutaban de las mejores oportunidades. A los 14 minutos Guillamón empleó un tiempo muerto para definir el juego hasta el final de la primera mitad. Acto seguido Rahali aprovechó un despiste defensivo del Segovia para rematar a placer y conseguir el primer tanto. Tras el gol, los visitantes intensificaron su ataque frente a un rival que trataba de aumentar su ventaja a través de las contras. Pero los locales se encogieron en los últimos instantes, dejando jugar demasiado al rival. Tanto fue así, que los segovianos igualaron el choque justo antes del descanso por obra de Alvarito.

La segunda mitad comenzó como el final de la primera, con un juego muy lento y demasiadas interrupciones. Una de ellas fue por la lesión del visitante Alvarito, que sufrió un pinchazo en uno de sus abductores. Los locales no conseguían mantener el esférico, con lo que el peso del mismo se balanceaba para el lado visitante. A los 26 minutos, Álvaro y Sergio dispusieron de muy buenas oportunidades para disgustar a la parroquia local. Eran los peores momentos del Plásticos, que se sacudía el bache con destellos de calidad. De esta forma llegó el segundo tanto por medio de Ique. Este gol dio una inyección de intensidad a los locales, que empezaron a presionar en línea de ataque, contabilizando buenas oportunidades de las zapatillas de Attos y Fernández. Mientras tanto, el Segovia se desdibujó y las posesiones caían de la cuenta del Plásticos Romero, que aprovechó otro error de la defensa rival para marcar Juanpi el 3-1. A siete minutos del final, el Segovia tiró de casta y volvió a acercarse al marco de Raúl Jerez. Además, con portero-jugador logró acortar distancias por medio de Buitre. El 3-2 hacía presagiar que los últimos tres minutos serían agobiantes, pero volvió a relucir la calidad que tiene la plantilla blanquinaranja esta campaña con una jugada de Juanpi mediante la que Jesús estableció un 4-2 tranquilizador. El marcador lo cerró José Carlos a un minuto del final con el Segovia buscando a la desesperada acercarse en el tanteo, algo que no consiguió.