Al tiempo que completaba la mejor temporada de su historia, el Villanovense se convirtió en una de las ´bestias negras´ del Cartagena en la 2016-17. Un empate y una victoria de los extremeños es el balance de un curso en el que los de Monteagudo terminaron la liga por detrás de un equipo humilde, pero que hizo las cosas muy bien de principio a fin e incluso tuvo opciones de ascenso en el play-off. En una nueva andadura, esta noche (21:00, Cartagonova) estarán otra vez frente a frente en el feudo cartagenerista.
Sin embargo, los de Villanueva de la Serena presentan un equipo muy distinto al de la temporada pasada, empezando por el banquillo. Manuel Sanlúcar, ahora entrenador del Real Murcia, dejó su puesto a Iván Ania, mítico ex jugador del Real Oviedo. A sus órdenes, los verdes han empezado muy mal la temporada: empate en San Fernando, derrota en casa ante el Granada B, eliminación en Copa del Rey frente al Lorca Deportiva y nueva derrota en la cancha de Las Palmas Atlético. Los extremeños tomaron aire con su primera victoria liguera el pasado domingo ante el Jumilla.
En cualquier caso, son muchas caras nuevas respecto al equipo que acabara tercero el año pasado y progresara hasta la segunda ronda de play-off. En el camino habían aplastado al Cartagena en la segunda vuelta, con un 3-0 muy doloroso para los pupilos de Alberto Monteagudo. En la ida, los de Sanlúcar sacaron un valioso punto del Cartagonova.
En la ciudad portuaria llegan a este partido con la moral por las nubes, a un paso del sueño copero y tras haber vapuleado al UCAM Murcia en su propio estadio. Los de diez puntos de su casillero le colocan en la segunda posición de la tabla, al acecho del sorprendente líder de la categoría, la Balompédica Linense. A medida que se van solucionando los errores en la zaga de los primeros partidos, este Cartagena empieza a funcionar como un reloj suizo. Sabe perfectamente a lo que juega y las piezas obtenidas en el mercado veraniego se amoldan al esquema de Monteagudo a la perfección.
En las filas albinegras necesitaban un respiro como el que se han tomado esta semana. El doble esfuerzo de jugar Liga y Copa cada semana pasa factura en el plano físico de los jugadores. Sin ir más lejos, Míchel Zabaco se cayó de la convocatoria en La Condomina, y Álvaro González abandonó el césped en el primer tiempo por una contractura en el isquiotibial. Sin embargo, a la vuelta de la esquina hay un duelo contra el Talavera con el premio de enfrentarse a uno de los grandes de La Liga en juego.
Con Pau Torres asentado como portero en liga y sin alternativa alguna en los laterales, la duda está en quién ocupará el centro de la zaga. El venezolano Josua Mejías estuvo impecable contra el UCAM, y se ha ganado la oportunidad de repetir. Pero Míchel Zabaco está de vuelta tras perderse ese choque por un golpe en la cabeza en el duelo ante el Mirandés. Ceballos, Alberto Aguilar y Mauro son las otras opciones con las que cuenta Monteagudo. La profundidad de plantilla del Cartagena le permite rotar a varias piezas para afrontar con las máximas garantías el partido siguiente y evitar que alguno de sus hombres más importantes tenga que pasar por la enfermería.
El trivote formado por Sergio Jiménez, Cordero y Chavero funcionó de maravilla el sábado pasado, pero hoy puede dar descanso a alguno de ellos para que entre otro hombre de banda. Y Dani Abalo cuenta con todas las papeletas. El ex jugador del Celta de Vigo disputó sus primeros minutos vestido de albinegro en La Condomina, pero la afición del Cartagonova aún desea ver a este extremo con el cartel de haber jugado cuatro temporadas en Segunda con los vigueses.
Álvaro González puede entrar en la convocatoria, pero aún no está al cien por cien para arriesgar con su titularidad. Por su parte, Hugo Rodríguez también ha tenido problemas físicos esta semana, y Kuki Zalazar espera su oportunidad de jugar un partido completo y enamorar a su hinchada. En el ataque, Aketxe podría descansar y dejar su sitio a Moussa. El guineano no ha sido titular desde hace dos semanas, cuando marcó el primer tanto del partido en el choque que enfrentó a los cartageneristas con el Melilla.
