Abandonaron a la misma vez la capital del Segura, tras ser considerados héroes en sus respectivos equipos. Hicieron saltar al pueblo murciano de sus butacas, aunque en distintos estadios, con goles y triunfos históricos. Pero sus respectivas salidas, de UCAM y Real Murcia, no se sucedieron con clarines y timbales. Eso sí, ambos pueden tener la conciencia tranquila: lo dieron todo por la elástica que un día defendieron.

César Remón y Germán Sáenz son dos tipos que, a nada que les acompañe la suerte, se hacen notar y sentir. Abandonar Murcia y los distintos clubes que en la capital cohabitan les ha servido a ambos para conocerse. Un pasado que recuerdan con cariño y algún que otro 'pique'. El duelo de la capital que mañana se celebra ha permitido a LA OPINIÓN charlar con ambos. El no ver sus rostros no impide que, a través de las ondas, se capte su agradecimiento y la felicidad que transmiten cuando se les menciona Murcia. Además, por supuesto, recuerdan con pelos y señales los dos partidos en los que ambos se enfrentaron y en los que pudieron saborear tanto la victoria como la derrota.

Se sienten capaces de todo en su nueva etapa con el Logroñés, club con el que son líderes en el Grupo II y suspiran por superar la tercera ronda de Copa del Rey. Pero antes de llegar hasta La Rioja, César Remón y Germán Sáenz fueron rivales en la temporada 2015-2016. Sus exequipos mantuvieron un pulso constante durante aquel curso. Si bien César coronó con el UCAM la cota más alta que el club universitario ha alcanzado jamás, Germán fue el goleador que todos recuerdan en una campaña en la que el Real Murcia conectó hasta dieciséis partidos consecutivos sin perder en una racha histórica para la entidad centenaria.

No obstante, si en algo coinciden nuestros dos protagonistas es en cuánto echan de menos el clima de la Región. Una cuestión que cualquiera, autóctono o foráneo, puede confirmar. Y es que en Murcia se vive muy bien. Eso sí, ambos tienen claro que, por motivos futbolísticos, no quieren regresar a Murcia en un hipotético play off de ascenso: «El Grupo IV tiene gallos de pelea, es el más fuerte, el que no quiero», concuerdan.

Aún con ello, César Remón, natural de Logroño, tuvo la suerte de volver a casa tras concretar su marcha del UCAM tras tres temporadas. Uno de los jugadores más carismáticos de la breve pero intensa historia del club universitario decía adiós a mitad de campaña tras una escasa participación en Segunda.

'Hoy es diferente, hoy juega el UCAM Murcia'. César Remón sentó cátedra y, junto con otros ilustres como Robles, Góngora, Nono o Tekio, puso su sello como buen centrocampista en un proyecto que giró, futbolísticamente hablando, sobre su figura. Ahora, tras su marcha, solo quedan palabras de agradecimiento por su parte: «Tengo mucho cariño a la familia Mendoza, dejé muchos amigos a los que estoy muy agradecido».

En la otra cara de la moneda, Germán Sáenz, por el contrario, cada día se aleja más de casa -es tinerfeño-. Experimentó días complicados cuando se confirmó su marcha del Real Murcia con destino a Cartagena. Tras esa gran temporada a nivel personal, el jugador que encandiló a Nueva Condomina sufrió una grave lesión de rodilla de la que le costó recuperarse. Hoy relata sentirse «perfecto», pero por aquel entonces, confiesa que «la afición tuvo mucha más paciencia que el club». El lavado de imagen que la plantilla experimentó el pasado invierno también afectó a Germán, un futbolista al que muchos consideraban intocable: «Por intereses del club, al final tengo que salir y se pinta todo de una manera que me perjudica bastante: eso es lo que más me jode, la imagen que me gané se tiró por tierra cuando se vendió otra cosa. Pero no hay duda de que fue uno de mis mejores años. Eramos un grupo espectacular, aunque al final no saliesen las cosas, y me gané el cariño de la gente, algo que no voy a olvidar. Pero esto es fútbol».

Y eso es algo innegable. Los caprichos del balompié, difíciles de entender en ocasiones, han querido que en Logroño, para esta nueva campaña, se reúnan dos exjugadores del UCAM como son César Remón e Iván Aguilar, y hasta cuatro con pasado murcianista, tal y como sucede con Germán, Rayco, Borja Gómez y Titi. Cachondeo, piques sanos, y sobre todo, mucha curiosidad e interés, se aúnan en Las Gaunas. Relata Germán que «estamos todo el día 'jodiéndonos', a César le gusta mucho el morbillo que teníamos por el pique entre Murcia y UCAM. Le digo relájate, que ahora jugamos en el mismo equipo», cuenta risueño.

César y Germán fueron los únicos, junto al exuniversitario Iván Aguilar, que coincidieron sobre el césped murciano, tanto en la vieja como en la nueva Condomina. Y he aquí el motivo de estas líneas. Nadie como nuestros protagonistas recuerda el ambiente experimentado la tarde del 16 de abril de 2016 en Nueva Condomina: «No esperábamos que fueran 18.000 personas, fue algo que no esperaba nadie y que vivió muchísima gente, ya no solo de Murcia, sino gente de fútbol de Alicante o Albacete que quiso vivirlo», comenta César Remón. Por su parte, Germán relata que vivió «un partido espectacular, nadie esperaba tanta gente y se salió de lo normal».

Los pronósticos, para 'casa'

Aunque, en líneas generales, los ex de la Región que conviven en Logroño ven ligeramente favorito al Murcia, César Remón lo tiene claro: «Un 0-1 para el UCAM. Pero, aunque quiera que gane el UCAM, le deseo toda la suerte del mundo al Murcia a partir de ese día, y que ascienda a Segunda». Germán, por su parte, se aventura aún más y echa un cariñoso capote al único jugador que actualmente se mantiene en el Real Murcia, y que coincidió en el club grana con él: el capitán Armando. «Digo un 2-1, pero que marque Armando con su 'tiro del fuego', eso es lo más importante».