En verano hubo una consigna clara. La dirección deportiva del Real Murcia que dirige Deseado Flores quería cerrar los fichajes lo más rápido posible para que el entrenador tuviera a los máximos efectivos disponibles para comenzar la pretemporada. Y efectivamente la entidad grana, gracias en parte a que las ofertas que ha realizado este curso han sido en muchos casos irrechazables, consiguió más o menos el objetivo que se había marcado en este sentido, ya que las incorporaciones teóricamente más importantes han llegado con tiempo. El problema es que esa planificación temprana está teniendo una reacción un tanto radía sobre el campo, ya que los granas en cuatro jornadas solo han sido capaces de conseguir una victoria habiéndose enfrentado a conjuntos que, en principio, no parten con la presión de ser candidatos al ascenso.

Con diecisiete incorporaciones en una plantilla que el curso anterior llegó a la segunda ronda del play off de ascenso, la nueva apuesta de revolucionar el equipo no está saliendo, tras un mes de competición, como esperaban los aficionados. Los granas tienen cinco puntos en su casillero en este arranque del torneo y se resisten las alegrías, ya que en cuatro partidos, los pupilos de Manolo Sanlúcar solo han sido capaces de ganar un partido en Liga, la goleada en casa ante El Ejido (4-1), ya que la primera jornada fue un jarro de agua fría para los aficionados ver cómo su equipo perdía ante un Écija recién ascendido de Tercera y que encima ha conservado el bloque del curso anterior.

Desde ese partido las dudas se instalaron muy pronto en una grada que, por ahora, se conforma con que el equipo está a una ronda en la Copa del Rey de entrar en el selecto grupo de los privilegiados que podría tropezarse con el Real Madrid o el Barcelona, además de los otros equipos que juegan en Europa. Las sonrisas en una Copa del Rey que ha dejado de ser 'maldita' para lo granas, que llevaban seis años cayendo en primera ronda a las primeras de cambio, también ha servido un poco para paliar la decepción del inicio del campeonato.

La sorprendente derrota contra el Écija y el empate en Huelva solo pasaron a un segundo plano en la jornada siguiente, tras golear a El Ejido, ya que el empate sin goles en el complicado campo del Melilla tampoco oculta que el Murcia necesita comenzar a aumentar su casillero de manera urgente para evitar justo lo que ocurrió hace un año, es decir, que hubo que enmendar con una segunda vuelta de escándalo los irregulares resultados hasta el ecuador del campeonato.

Y evidentemente cuando las cosas no funcionan como los dirigentes quieren todas las miradas se van al banquillo, a un sitio desde el que Manolo Sanlúcar todavía tiene crédito para tratar de sacar de forma rápida la mejor versión de estos jugadores, pero que no puede entretenerse. De la misma manera que la actual directiva asume que tardó demasiado tiempo en despedir el curso anterior a Paco García y traer a Vicente Mir, Sanlúcar es el primero en saber que cada semana que pase sin ganar es un motivo más para que Deseado Flores levante el teléfono en busca de un sustituto. El técnico, que en apenas un mes de competición le ha dado ya la alternativa a todos los jugadores salvo Nadjib, el último en aterrizar, no sabe a ciencia cierta cuál es su once titular, algo que en el Murcia de hace un año, en la segunda vuelta, la afición ya se sabía de memoria.

Algunos de los fichajes que se suponía que iban a marcar las diferencias no están cumpliendo las expectativas y, por si fuera poco, el Murcia actual no es ni mucho menos el 'muro' que terminó siendo la defensa formada por Juanjo, Golobart, Josema y Pumar. Si encima la retaguardia ha arrancado con dudas, encima Fede Vega y David Mateos, un lateral derecho y un central, se retiraron lesionados en el choque de Copa ante el Racing de Ferrol. Aunque el club no ha facilitado parte médico de ningún jugador, parece ser que Vega podría estar de baja unas tres semanas, mientras que Mateos, según explicaron a este diario, sufrió solo una sobrecarga debido a que lleva una temporada en blanco y notó la fatiga muscular siendo titular en Copa. El Murcia necesita el sábado en el duelo regional ante el UCAM los tres puntos para obtener tranquilidad y poder centrarse en una eliminatoria de Copa que se4 puede considerar vital para una institución asfixiada por sus deudas.